Nace en Cádiz en 1978 y nos citamos con él en CasaLa Teatro, en pleno corazón de Triana, en el mismo mercado de la Plaza del Altozano. Llegar hasta este lugar nos hace oler las frutas y verduras del día, el pescado fresco que sale a la venta y cruzamos una discreta puerta para llegar a un espacio pequeño en el que no más de treinta butacas se convierten en espectadores de la conversación con José Anillo. Su infancia está cerca del cante por su familia, hasta que «siendo atrevido» consiguió cantarle a Manuela Carrasco, nos cuenta la curiosa historia. Ha estado con Cristina Hoyos, «con la que aprendí a ser artista arriba y abajo del escenario». «Hoy no hay compañías de baile por falta de apoyo de la Administración», dice el cantaor, que aunque ama a Cádiz le tiene especial cariño a Sevilla. Ahora está ultimando el que será su nuevo disco, junto a El Bolita, porque ha contado con el apoyo de «Claudia Bermúdez, un regalo divino». Dedica parte de su tiempo a impartir clases en línea con su «Comunidad Anillo».