El fandango en el rock (II)
En la entrada anterior pudimos oír a unas cuantas bandas y solistas de rock que grabaron canciones inspiradas en malagueñas, granaínas, tarantos y fandangos. En esta segunda entrega un ilustre pariente del fandango, el bolero, tendrá una presencia importante. Se trata de escuchar buena música sin prejuicios.
En la entrada anterior pudimos oír a unas cuantas bandas y solistas de rock que grabaron canciones inspiradas en malagueñas, granaínas, tarantos y fandangos. Al principio del artículo recordábamos la portada de un disco de los ZZ Top, Fandango!, y también a la banda de Joe Lynn Turner, de igual nombre. Ahora traemos a colación a un grupo de cinco adolescentes mexicanas llamado Fandango. El ideólogo fue el productor Abelardo Real, que creó para ellas un sonido de pop sintético y chicloso al estilo de Bananarama o las Bangles. Su segundo LP fue disco de oro y se llamó Autos, moda y rock and roll (Emi Capitol, 1987). Pese al título, tenía poco que ver con el rock y mucho con el plástico.
En esta segunda entrega un ilustre pariente del fandango, el bolero, tendrá una presencia importante. Como ya dijimos, lo que se trata en definitiva es de escuchar buena música sin prejuicios de ningún tipo.
Jeff Beck
El pasado 10 de enero falleció uno de los mejores guitarristas de rock, Jeff Beck, que formó parte de The Yardbirds, grupo pionero del rock y rhythm and blues británicos. Esta formación es bien conocida porque contó con otros dos fenomenales guitarristas, Eric Clapton y Jimmy Page, antes de formar Led Zeppelin. En 1966 Beck deja a los Yardbirds y es cuando entra Page. Ese mismo año Beck graba una composición de su amigo Jimmy Page titulada Bolero’s Beck. El tema aparece como cara B del single Hi Ho Silver Lining (Columbia, 1967) y formará parte de su primer LP en solitario, Truth (Columbia, 1968), que contó con Rod Stewart como cantante. La formación que acompaña a Beck en el tema es de ensueño. La base de bolero la llevan la batería de Keith Moon (miembro de The Who), Jimmy Page, con una guitarra de 12 cuerdas, John Paul Jones al bajo (que luego lo será en Led Zeppelin) y el gran pianista Nicky Hopkins (apabulla la lista de grandes grupos con los que ha colaborado). Poco antes de llegar a la mitad del tema, Moon lanza un alarido y rompe de manera salvaje con la dinámica del tema, que volverá poco más tarde por los cauces del bolero. El zambombazo del malogrado baterista fue tremendo, pues tiró los micros de los bombos de la batería. Por eso lo que más se escucha son los platillos.
Deep Purple
Deep Purple junto con Led Zeppelin y Black Sabbath forman la terna principal del rock duro británico de los setenta. En 1970 estrenaron su formación más clásica para grabar el cuarto disco, el descomunal In Rock (Harvest, 1970). En el álbum aparece Child in Time, un tema en el que Ian Gillan hace alarde de sus dotes vocales con unos inolvidables gritos que culminan a ritmo de bolero marcado por el baterista Ian Paice (en 3:20). Inolvidable es la incandescente versión del álbum en directo Made In Japan (Purple Records, 1972).
La canción aparece firmada por el quinteto pero, ¡ay!, hubo apropiación indebida. El principio es un calco de Bombay Calling del grupo de San Francisco It’s a Beautiful Day, que aparece en su primer disco, It’s a Beautiful Day (Columbia, 1969).
King Crimson
King Crimson ha sido (y sigue siendo) una de las mejores bandas de rock progresivo de todos los tiempos. En su tercer LP, Lizard (Island, 1970), se halla Bolero-The Peacoks Tale, instrumental en el que el mismo ritmo del Bolero de Ravel lo lleva el baterista Andy McCulloch. En esta obra maestra de extraña belleza, el pianista Keith Tippet junto con los vientos de Mel Collins, Marc Charig, Robin Miller y Nick Evans incursionan en los terrenos del free jazz mediante variaciones sobre la melodía del tema que le precede, Prince Rupert Awakes, que lo canta Jon Anderson, de Yes.
Family
Ritmo abolerado y afandangado tiene una canción que aparece en Fearless (Reprise Records, 1971), quinto LP del grupo británico Family, el primero en el que cuentan con John Wetton a la voz y el bajo, antes de formar parte de King Crimson. El título de la canción ya nos hace sospechar algo: Spanish Tide.
Blackfeather
Y seguimos en el mismo año. No muy conocida es la banda Blackfeather. En su disco debut, At the Mountains of Madness (Infinity, 1971), se descuelgan con el curiosísimo Mangos Theme, Pt. 2, tema en el que bajo el soporte del bolero asoman sonoridades andaluzas y morunas. El conjunto es un claro ejemplo de rock sinfónico de sabor hispano hecho en… ¡Australia! Como anécdota cabe decir que en el tema Seasons of Change Pt 1 toca los timbales y la pandereta Bon Scott, el malogrado y carismático cantante de AC/DC entre 1974 y 1980.
En el mismo disco de Blackfeather se encuentra Spanish Blues, que forma parte del largo tema The Rat (Suite). En el min. 7:07 el piano de John Bisset y la guitarra de John Robinson anuncian aromas españoles que se van adentrando poco a poco y de manera natural en la malagueña de Lecuona.
Carmen
Del primer disco del grupo británico-estadounidense Carmen nos ocupamos en la anterior entrega. En su tercer y último LP, Dancing on a Cold Wind (Regal Zonophone, 1975), toman para la portada el logo de la marca de cigarrillos franceses Gitanes (mi admirado J.J. Cale recrea ese mismo diseño para su disco Shades, de 1981). Ellos siguieron fieles al espíritu ecléctico con el que cocinaban un rock progresivo de sabor hispano-flamenco-kitsch. Al final del tema Viva mi Sevilla (5:23) aparece el ritmo del bolero, de forma muy parecida a como hicieron los Deep Purple en Child In Time.
La portada y contraportada del disco de Carmen abren este artículo.
Queen
También tira de bolero Queen, la banda británica liderada por Freddie Mercury, en el tema Innuendo, del álbum homónimo (Hollywood Records, 1991). Fue el último disco que grabó Mercury, que falleció en noviembre de ese año. Se trata de una compleja composición con varias partes que comienza con la batería de Roger Taylor marcando el ritmo del bolero. Brian May le sacaba jugosas sonoridades andaluzas a su guitarra eléctrica, pero no le pasaba igual con la española. Casualmente, por el estudio asomó a saludar al productor David Richards un virtuoso guitarrista amigo de Mercury. Era nada más y nada menos que Steve Howe, de la banda de rock sinfónico Yes. Howe resolvió rápidamente la papeleta: a la mediación del tema (3:35) toca por fandangos más bien que la mar aunque, eso sí, no con el sabor del Niño Ricardo.