Antonio Barberán: «Estoy preso en el cante de Manolo Caracol»
Se define a sí mismo como investigador de asuntos flamencos y flamenco a fin de cuentas. Autor del blog Callejón del duende, Antonio Barberán Reviriego es una institución en el estudio del arte flamenco y sus orígenes gaditanos.
Antonio Barberán, de Paterna de la Rivera (Cádiz), aunque afincado en la Tacita, es un investigador nato. Sin sus valiosas aportaciones se sabría poco sobre la historia del flamenco y sus intérpretes en Cádiz, una de las cunas importantes del arte jondo. Es un verdadero ratón de biblioteca y un hombre con una habilidad extraordinaria para buscar datos sobre los muchos artistas que ha dado esa provincia andaluza.
– Dígame, para empezar, con pocas palabras, qué es Cádiz para usted.
– Salada claridad y un montón de problemas aún por solucionar.
– ¿A qué edad entendió que tenía que ponerse a investigar en la Tacita?
– Desde el mismo instante en que me comunicaron que el célebre Enrique El Mellizo, personaje descrito entonces, rayano en la locura y de muy triste presencia, fue el creador –entre otros– del cante por alegrías. ¡Eso no me cuadraba! Una de dos: o bien no inventó dicho cante, o bien no era tan rara avis como lo describían. Su necrológica publicada en el Diario de Cádiz al siguiente día de su fallecimiento demostró su buen humor, netamente andaluz.
– ¿Es Cádiz la cuna del flamenco?
-Sin duda alguna. Cádiz y sus Puertos conforman la cuna más primitiva, conjuntamente con Jerez, que además aporta diferente sello propio. Pero también es cuna Sevilla y su provincia, dada su cercanía y que en las citadas localidades triangularon en plena época creadora –mediados del siglo XIX– las contadas familias gitanas creadoras de cantes flamencos.
– ¿Creé que el Planeta y su sobrino Lázaro cantarían con pellizco?
– Pellizcar es un verbo flamenco que admite varias tipologías de voz. Marchena pellizcaba de un modo y El Borrico, de otro. Ciertamente no tenemos datos, pero cantar bien, seguro que sí. Estébanez Calderón describió al Planeta como Rey de los dos Polos y Eduardo Asquerino como el Rey de los ruiseñores. Posiblemente lo hicieran de forma distinta a lo acostumbrado hoy en día, pero a buen seguro no faltos de elevadas dosis de sal.
«Cádiz es una fábrica creadora y poco conservadora. Aquí se ha cantado siempre muy requetebién»
– ¿Cómo vería un gran centro de documentación en Cádiz dedicado al flamenco? ¿Lo ve viable?
– Sería algo extraordinario, pero me inclino más por un Centro de Interpretación del Arte Flamenco, donde se incluiría una sala de documentación y asesoramiento a la investigación documental y sonora. En cuanto a si lo veo viable, he de contestar tristemente que no.
– ¿Y por qué no se ha hecho? ¿Dónde cree que está el problema?
– Llegué a presentar un proyecto tanto al anterior equipo de gobierno como al actual, pero no recibí apoyo alguno. Cádiz es una ciudad muy peculiar y con pocos recursos económicos. Además, de hacerse un centro de las citadas características iría seguramente enfocado al Carnaval antes que al flamenco, dado que aquí es más popular.
– Una curiosidad personal. ¿Por qué, siendo de Paterna, aún no sabemos quién fue La Petenera?
– Según la conocida letra, Fue una mujer y hoy un cante. Pero de la cantaora Dolores La Petenera aún no tenemos dato alguno. Tengo muy claro desde hace muchos años que la relación de Paterna de Rivera con el nacimiento de este cante es nulo. Ahora bien, le corresponde por derecho propio a dicha localidad enarbolar su bandera, pues ha sido precisamente este pueblo el que ha mantenido vivo a este flamenquísimo y muy primitivo cante, vilipendiado injustamente por un gran sector del mundo flamenco.
– Dígame tres grandes mentiras de la historia del cante de Cádiz.
– Mentiras en cuanto a la historia del cante flamenco ha habido muchas. Especialmente de Cádiz, las habrá, pero ahora no las recuerdo. Ahora bien, si usted me lo permite quisiera aclarar un concepto muy utilizado con algunos cantaores de Cádiz a los que han tachado de mentirosos. Una cosa es el embuste, que es una mentira tan descarada que causa risa, y otra muy distinta es ser mentiroso. Aquí hemos sido/somos embusteros en cuanto al anecdotario, que no en cuanto al cante.
– Y ahora tres grandes verdades.
– Cádiz es una fábrica creadora y poco conservadora. Aquí se ha cantado siempre muy requetebién. Y es Cádiz precisamente la que más cantes aporta al flamenco: soleares, seguiriyas, malagueñas del Mellizo y Fosforito, romances, cantiñas, alegrías, tangos, tanguillos y tientos, fandangos (varios estilos), bulerías de cuño propio y casi la totalidad de cantes provenientes de ultramar. Hay muchos más, pero con los citados me conformo.
«En Cádiz hemos sido/somos embusteros en cuanto al anecdotario, que no en cuanto al cante»
– ¿Cuál es su cantaor de todos los tiempos, de Cádiz o de fuera de la Tacita?
– Estoy preso en el cante de Manolo Caracol, sevillano de nacimiento pero descendiente de la más grande familia cantaora/bailaora/torera que se ha dado en la historia: los Ortega de Cádiz, de donde han salido siete generaciones de excelentes artistas.
– ¿Tiene futuro el cante en Cádiz?
– Si no lo tuviera se acabaría el flamenco, pues, como dije antes, una gran proporción de cantes y estilos flamencos son de nacencia gaditana.
– ¿Usted canta, toca la guitarra o baila, o es un malaje de Cádiz?
– Yo soy investigador y un enamorado del flamenco. Dicho enamoramiento me lleva inevitablemente a atreverme –en reuniones íntimas de amigos– a cantar e incluso a pegarme una patá, pero no a más. Ya quisiera yo hacerlo medianamente bien, pero no soy artista. El toque es mi gran asignatura pendiente. En cuanto a lo de malaje, espero que no. Usted me conoce bien y sabe que me apunto a un bombardeo.
– ¿De qué se siente más orgulloso como investigador?
– Me siento orgulloso de haber contribuido en parte al esclarecimiento de muchos aspectos desconocidos de este arte. También cuando recibí el premio de investigación en La Unión, por el doble cedé Tesoros del Cante Antiguo Gaditano, interpretado por Carmen de la Jara.
Paco de Cái 16 septiembre, 2019
Antonio es desde luego un gran investigador con su blog me ha hecho pasar muy buenos ratos y además me ha servido de enseñanza y gracias a él se mucho más del nuestro Flamenco.
Gracias Antonio.