Si el Festival de Jerez ha conseguido posicionarse desde sus inicios (1997) en lo más alto del prestigio y admiración para la danza y el flamenco internacional es gracias a hitos como el del jueves 17 de febrero. La jornada inaugural de esta edición, la vigésimo sexta, estuvo marcada por la excelencia del Ballet Nacional de España que llegó con el montaje dedicado al Centenario Antonio Ruiz Soler, o lo que es lo mismo, el grito más exacerbado a la belleza plástica del cuerpo en movimiento. ¡No se puede empezar mejor!

 

De nuevo comprobamos cómo la gestión de este certamen sigue siendo pulcra en valores. Era justo y estrictamente necesario recordar a Antonio El Bailarín (1921-1996), quien supo dibujar las estampas más preciadas en forma de coreografías, ostentando el cargo de número uno del escalafón durante décadas tanto en España como, incluso en mayor medida, en el resto del mundo.

 

 

«El espectáculo se suma a otras actividades que se han preparado para esta edición en torno al ilustre sevillano que hizo de la danza el lenguaje más poético de Andalucía»

 

 

El Teatro Villamarta recibió de nuevo la vida y el color del recuerdo, ese que aunque parezca descansar en el blanco y negro, se ve impregnado de alma cuando la función comienza. La pandemia parece no poder con este milagro cultural que cada año da más de sí y convierte a Jerez en el pulmón de la Cultura española por dos semanas, aunque algunos no se enteran.

 

 

 

 

La propuesta del BNE se puede definir como impoluta y conseguida. Cada bloque está bien definido y el espectador se deja seducir por la majestuosidad de un cuerpo de baile brillante. Eran las 20:40 horas cuando se alzó el telón y desde ese justo momento la fantasía se adueñó de la escena. No exagero si digo que es una de las mejores noches de las vividas en los últimos años del Festival, pues pocas veces se tiene ante tus ojos algo tan sumamente exquisito para la sensibilidad del arte.

 

Rubén Olmo, director, ha recuperado cuatro coreografías de Antonio para tal efeméride, como las Sonatas del Padre Soler (escuela bolera), que no se llevaban a escena desde 1982 y que favorecieron la mirada atenta del público. Otro de los aspectos a resaltar de esta inauguración fue la presencia en el foso del teatro de la Orquesta Bética de Cámara, algo absolutamente insólito que logró impactar en cada interpretación. Cada movimiento, pieza o coreografía estaba perfectamente trabajada desde la fidelidad a la primera versión. Entusiasta, el público aplaudía en cada silencio, eso denota la presencia excesiva de protocolo en las butacas. Era la jornada para aparecer, la inauguración. Noche de fotos en la que los políticos y otras instituciones se sienten más que valiosos por su apoyo público a la Cultura y al flamenco, a pesar de que todavía ni la Junta de Andalucía, ni el Ministerio de Cultura, o incluso ni algunos partidos de la oposición del Ayuntamiento de Jerez, han apostado verdaderamente por este Festival que lo que siempre necesita es más inversión económica.

 

 

«La propuesta del Ballet Nacional de España se puede definir como impoluta y conseguida. Cada bloque está bien definido y el espectador se deja seducir por la majestuosidad de un cuerpo de baile brillante»

 

 

Este espectáculo tiene una carga indiscutible de simbología, mensaje y valores. Esos por los que Antonio luchó durante sus décadas de gira, evangelizando la marca España gracias a su cintura, sus brazos y sus infinitas técnicas dancísticas y creativas. Y hasta el fin de sus días defendió su integridad humana también en el Ballet, del que fue director artístico desde 1980 a 1983.

 

Subrayaría de entre tanto bueno a Eduardo Martínez, bailarín lleno de talento que dibujó uno de los momentos de la noche. Posteriormente y con telón bajado, nos hicieron disfrutar del Vito de Gracia, coreografía de Antonio y Rosario interpretada cinematográfica en Hollywood que pasó a la historia como una de las joyas de la corona.

 

Momento para el baile jondo con Estampas Flamencas, incluyendo el infalible martinete que puso en fortuna Antonio, el zorongo con unos más que reseñables Inmaculada Salomón y Matías López, el taranto de Rubén Olmo (de una altísima factura) rematados con tangos de Granada, y los caracoles con un cuerpo de baile fulgurante con batas de cola blanca y mantones de distintos colores. Cerraron la primera parte por sevillanas, a modo de regalo sorpresa.

 

 

«No exagero si digo que es una de las mejores noches de las vividas en los últimos años del Festival, pues pocas veces se tiene ante tus ojos algo tan sumamente exquisito para la sensibilidad del arte»

 

 

El público se levantó y salió a la calle, muchos de ellos no volvieron. Había pasado una hora y cuarenta y cinco minutos y pensaron que todo había acabado. Otros, ante los comentarios en el hall del Villamarta, entraron de nuevo. Y comenzó una segunda parte en la que pusieron sobre la escena Leyenda (Asturias), de Albéniz, coreografiado por Carlos Vilán, que fue repetidor de Antonio en El Rocío. No faltó el Zapateado de Sarasate, con un excelso Francisco Velasco, que rompió el silencio del fondo negro del escenario.

 

En la última parte se puso en defensa una vez más el folclore gallego con Fantasía Galaica, en una demostración inequívoca de coordinación, trabajo, esfuerzo e ilusión. El público aplaudía, la maestra Angelita Gómez se puso de pie desde su butaca, claudicando ante lo sublime. Eran las 23.20 horas.

 

 

Ficha artística

Ballet Nacional de España – Centenario Antonio Ruiz Soler
XXVI Festival de Jerez. Teatro Villamarta. 17 febrero 2022.
Director: Rubén Olmo
Bailarines principales invitados: Esther Jurado, Francisco Velasco
Primeros bailarines: Aloña Alonso, Inmaculada Salomón, Antonio Correderas, Sergio García, Eduardo Martínez
Solistas: María Fernández, Débora Martínez, Miriam Mendoza, José Manuel Benítez, Albert Hernández, Carlos Sánchez
Cuerpo de baile: Ana Agraz, Cristina Aguilera, Estela Alonso, Sara Arévalo, Pilar Arteseros, Mercedes Burgos, Irene Correa, Patricia Fernández, María Martín, Sara Nieto, Laura Vargas, Aitana Rousseau, Noelia Ruiz, Irene Tena, Vanesa Vento, Sou Jung Youn, Juan Berlanga, Axel Galán, Cristian García, Álvaro Gordillo, Antonio Jiménez, Matías López, Adrián Maqueda, Álvaro Marbán, Alfredo Mérida, Javier Moreno, Javier Polonio, Pedro Ramírez, Manuel del Río
Cantaor: Gabriel de la Tomasa
Guitarristas: Enrique Bermúdez, Jonathan Bermúdez, Diego Losada, Víctor Márquez
Percusionista: Roberto Vozmediano
Pianistas: Juan Álvarez, José Luis Franco

 

Fotos: Javier Fergo – Festival de Jerez