Olga Pericet: la leona sin cueva
Crónica de la actuación de la bailaora cordobesa Olga Pericet en el XXVII Festival de Jerez. En 'La Leona', vuelve esa eterna joven de cuerpo sutil y vaporoso que consigue diseñar un todo visualmente entretenido y que nos hace disfrutar en todo momento.
El carácter con el que la cordobesa Olga Pericet afronta cualquier propuesta es fundamental para llegar a comprender el resultado de la misma. En este montaje, titulado La Leona, vuelve esa eterna joven de cuerpo sutil y vaporoso que consigue diseñar un todo visualmente entretenido y que nos hace disfrutar desde el primer momento hasta el último. Entendemos que no sobra nada, que Olga efectúa una celebración del flamenco originario, inspirándose en la época en la que aparece la Leona, una guitarra “muy extraña” encontrada en el Museo de la Música de París, etiquetada como “Almería, 1852”.
Esa sorpresa es la que ayuda a inspirarse a la bailaora, bailarina y coreógrafa a bucear en el contexto musical y reivindicativo del momento. Así, felina y sin aparente fragilidad, realiza una obra en la que baila sin despistes porque eso también se puede conseguir hoy día. A ver, que lo que importa es crear algo de emoción, y ella lo consigue sin necesidad de viajar a cuarto milenio para parecer posmoderna.
La Leona es dinámica, con movimiento, siempre mirando a los ojos y con una soltura dramática impetuosa. El color nos hace seguir el hilo, o dicho de otra manera, no nos aburre. Olga es infalible en sus zapateados, sus brazos son vitalistas y perfectos en colocación, pero lo que más destaca es su sonrisa, que también baila.
Esta idea es fruto de un proceso de trabajo y creativo que nace hace unos años, los conocidos como working progress, con los que hizo parada en la pasada edición del Festival de Jerez, en los Museos de la Atalaya. Aparece un año más tarde, 2023, en el Teatro Villamarta, para poner a funcionar uno de los espectáculos más aplaudidos en su género en la pasada Bienal de Sevilla, muestra en la que estrena con carácter mundial.
«Rondeñas y abandolaos, una subida de serrana, para cerrar una propuesta redonda que mantiene el equilibrio entre lo visual y lo emocional. Aparece evidenciada la transmisión de valores de una mujer insumisa, una leona que no tiene cueva»
Esta mujer de armas tomar se apoya musicalmente en un elenco al que no se le puede poner ninguna pega, pues son cinco y parecen cinco mil. El espacio sonoro es ilimitado gracias a la presencia de Juanfe Fernández, con el bajo, además de las guitarras de José Manuel León y Alfredo Mesa.
Israel Moro es la voz cantante, con potencia, y Roberto Jaén se hace cargo de los instrumentos de percusión además de mostrar su clásica faceta de actor humorista, incluye un perfil que da juego al diálogo que Olga necesita en algunos episodios como en el principio, cuando juega a hacer compás con las tijeras y comienza a diseñar la referida guitarra, formas arcaicas, que se hacen presentes en algunos instantes del baile.
El telón se abre con un fondo color anaranjado, parecido a la sabana africana, allí donde la leona no tiene cueva. Vive en libertad, moviéndose a su antojo y mostrando su constante mirada introspectiva. Sus pelos alborotados, el pecho fuera, una máscara y el gran cartel en el escenario con la palabra LEONA nos ayudan a introducirnos en su esfera. El rugido posterior de Roberto Jaén, de igual manera.
Con traje negro y camisa blanca, varonil, se marca una pieza de gourmet dancístico-musical, el Round Midnight, de Thelonious Monk. Desde un micrófono anuncia los integrantes del espectáculo, dándole especial matiz a Juanfe Pérez, por sacarle su lado “más erótico”. El clásico se adueña sonoramente del espacio con la guitarra de Alfredo Mesa, introduciendo notas de granaína, caminando por la época preflamenca. Baila con castañuelas y chubasquero amarillo.
Subida a una silla en una de las esquinas cuando el color del fondo pasa la mitad al negro, aparece bella y elegante de rosa, con volantes, con esas formas guitarreras en sus extremidades, tirándolas al suelo de forma arbitraria. El cantaor destaca por milongas, luego apunta la malagueña de Chacón, y la leona nuestra muda la piel. Se acerca el final, con rondeñas y abandolaos, una subida de serrana, para cerrar una propuesta redonda que mantiene el equilibrio entre lo visual y lo emocional, y sobre todo aparece evidenciada la transmisión de valores de una mujer insumisa, una leona que no tiene cueva.
Ficha artística
La leona – Olga Pericet
Teatro Villamarta – XXVII Festival de Jerez
5 marzo 2023
Baile Olga Pericet
Guitarras José Manuel León, Alfredo Mesa
Bajo Juanfe Pérez
Percusión Roberto Jaén
Voz Israel Moro
Idea original, dirección artística, musical y coreografía Olga Pericet
Dirección de escena y asesoramiento en la creación Carlota Ferrer
Música original y arreglos José Manuel León, Alfredo Mesa
Diseño de iluminación Gloria Montesinos
Sonido Sandra Vicente, Ángel Olalla
Asistencia técnica Soviled
Vestuario Olga Pericet, Carlota Ferrer
Taller de sastrería Maribel Rodríguez, Nuria Dorado
Fotografía y vídeo Paco Villalta
Producción ejecutiva Miquel Santín
Distribución Peineta Producciones