María Pagés poco tiene que demostrar ya en el baile. Su grado de madurez es tal que no deja sitio para la sorpresa y acude una y otra vez a las innumerables herramientas que sus brazos le permiten. La premiada con el Princesa de Asturias es una de las que cambiaron el concepto escénico hace décadas y por eso se entiende que estamos ante una producción de nivel. Algo más que fundamentales resultan sus extremidades para la conformación de una estética inigualable. Esto último se ha referido hasta la saciedad, poco se puede aportar al respecto.

 

De igual modo que no se pueden poner en cuestión sus ejemplares coreografías a base de idas y venidas, vuelos y delicadas posturas, de un cuerpo de baile de ocho jóvenes mujeres que parecen flotar sobre el escenario. Pocas como ella en ese terreno. Conforma un corpus dancístico de marca suprema.

 

Estas dos reflexiones son las que podemos destacar de cuantas nos florecen tras presenciar la obra De Scheherezade en el marco del Festival de Jerez, en el Teatro Villamarta. La mujer se adueña del escenario de principio a fin, todo envuelto en un mensaje musical que camina entre lo flamenco, lo popular y lo clásico, con las voces potentes y rebosantes de personalidad de Ana Ramón y Cristina Pedrosa. Este montaje, dirigido por la propia María y El Arbi El Harti, “se centra en la figura de la mujer y de la palabra como el mejor instrumento que tenemos para el entendimiento y resolver los conflictos”, explicó en rueda de prensa la artista.

 

Las guitarras son las de Rubén Levaniegos e Isaac Muñoz se sitúan en un discreto segundo plano, al igual que la percusión de Txema Uriarte. Algo de más presencia, quizás por su impronta dentro del universo místico de la gala, tiene el violín de David Moñiz y el chelo de Sergio Menem.

 

 

«La mujer se adueña del escenario de principio a fin, todo envuelto en un mensaje musical que camina entre lo flamenco, lo popular y lo clásico, con las voces potentes y rebosantes de personalidad de Ana Ramón y Cristina Pedrosa»

 

 

 

 

En once escenas se desarrolla un montaje de una gran solvencia técnica y en el que María, como principal motor de la obra, vuelca sus pasiones y aspiraciones en el cuerpo de baile, a modo coral y por solitario, que representan las más positivas y esperanzadoras estampas con vestuario de seda, de colores tierra, y siempre la luna como fondo principal.

 

En cuanto al repertorio, suenan estilos como bulerías, soleá apolá o más tarde la taranta. No hay una dificultad suprema para entender el guion narrativo, pues la imagen que ofrece, la belleza plástica, la coordinación y el movimiento es lo que hace de esta obra algo especial.

 

Dicho todo esto, no tengo por menos que reconocer que en ocasiones se me hacía repetitivo y denso. La culpa quizás es mía, pues me apetece vibrar y no lo hago. Todo lo contrario. El misticismo y lo espiritual se apoderan del escenario.

 

Sí que vibré, y permítanme el comentario aprovechando el espacio de esta página, con el baile de Manuela Carpio y Pepe Torres. Pasó ya entrada la madrugada, en la Peña La Bulería, en un improvisado fin de fiesta tras el concierto de Lela Soto y Juanfran Carrasco. Miguel Salado no guardó la guitarra, la hizo sonar para que Enrique El Extremeño se subiera también. Baile de un minuto, casi una lágrima por la mejilla. Manuela Carpio y Pepe Torres, insisto. Vibré.

 

 

Ficha artística

De Scheherezade – Compañía María Pagés
Teatro Villamarta – XXVII Festival de Jerez
4 marzo 2023

Baile: María Pagés, Júlia Gimeno, Almudena Roca, Ariana López, Meritxell Rodríguez, Sofía Suárez, Marina Madiedo, Yardén Amir, Raquel Guillén
Voz: Ana Ramón y Cristina Pedrosa
Guitarra: Rubén Levaniegos e Isaac Muñoz
Chello: Sergio Menem
Violín: David Moñiz
Percusión: Txema Uriarte.

Dirección: María Pagés & El Arbi El Harti
Coreografía, diseño de vestuario y dirección musical: María Pagés
Dramaturgia, textos y letras: El Arbi El Harti
Composición musical: Rubén Levaniegos, Sergio Ménem, David Moñiz, María Pagés
Diseño de iluminación: Olga García (A.A.I.)
Escenografía: María Pagés, El Arbi El Harti
Teñido y realización de vestuario y escenografía: María Calderón, Sandra Calderón