El Planeta, primera figura del cante gitano (1)
El legendario cantaor y guitarrista de Cádiz está considerado como el primer gran maestro del cante gitano andaluz. El escritor costumbrista malagueño Serafín Estébanez Calderón lo dio a conocer en su célebre relato 'Un baile en Triana' (El Heraldo, 1842).
¿Cuáles fueron las primeras referencias de Silverio Franconetti? Es imposible saber esto, pero si nació en 1831 pudo conocer e incluso tratar personalmente a la mayoría de los pioneros del cante, los nacidos a finales del XVIII, bien en Morón de la Frontera o cuando dejó el pueblo adoptivo para comenzar a vivir del cante en la Sevilla del inicio de los cincuenta, la de las academias de baile. Por edad, el cantaor pudo conocer perfectamente al Planeta.
El legendario cantaor y guitarrista de Cádiz está considerado como el primer gran maestro del cante gitano andaluz, pero hasta hace poco tiempo solo lo conocíamos por su remoquete artístico, su apodo. El escritor costumbrista malagueño Serafín Estébanez Calderón (1799-1867) lo dio a conocer en su célebre relato Un baile en Triana (El Heraldo, 1842), pero no aportó ninguna información biográfica. Demófilo lo hacía natural de Cádiz en su Colección de Cantes Flamencos (1881), sin aportar tampoco datos útiles para proceder a localizarlo en vetustos legajos parroquiales y deteriorados padrones municipales. Al no conocerse su nombre y apellidos resultaba prácticamente quimérico averiguar de dónde era, cuándo nació, si se casó y tuvo hijos o dónde y cuándo murió.
En un artículo de La Iberia, de la capital de España, del 30 de mayo de 1856, sobre un libro del barbero sevillano Joselito Pantoja, se aseguraba que era malagueño y que le había compuesto al tal Pantoja “una caña y una soleá”, según sus palabras. ¿Letra o música? No deja de ser revelador que el Planeta tuviera ese reconocimiento de creador ya en aquellos años, cercanos su muerte.
«La empresa no era fácil, pero alguna vez había que emprender la apasionante y gravosa aventura de localizar al primer cantaor influyente de la historia del cante jondo»
En otro artículo, en esta ocasión del escritor y político malagueño José Carlos de Luna, en ABC, del 27 de abril de 1962, lo hacía también natural de Málaga y aseguraba que fue quien pagó la llave de plata del cante concedida en el Café Sin Techo de Málaga a Tomás el Nitri. Por último, Rafael Benítez Caballero, autor de la obra El Barquero de Cantillana –editada en 1894–, se refería a él también como el Tío Antonio El Planeta: «Pasé por una tienda de montañeses donde había juelga, y entre otras, se la oí cantar al Tío Antonio El Planeta, que no cabía más de bien y de sentimiento».
¿Cómo localizar sus datos personales sin saber sus apellidos? Sólo había una manera y era partiendo de la partida de nacimiento de Manolo Caracol, su tataranieto, aunque instruidos y sesudos investigadores siempre dudaran de que el genio sevillano de la calle Lumbreras fuese tataranieto del Rey de los Polos, como lo definió Estébanez Calderón. Ricardo Molina y Antonio Mairena entre ellos. La empresa no era fácil, pero alguna vez había que emprender la apasionante y gravosa aventura de localizar al primer cantaor influyente de la historia del cante jondo, que esté documentado. Si buscaba al tatarabuelo materno de Caracol y descubría que se llamaba Antonio y que era natural de Cádiz, estaba claro que se llegaríamos a buen puerto, que es lo que ocurrió.
En la partida de nacimiento de Manuel Ortega Juárez, Caracol, encontramos los nombres de sus abuelos, como es lógico, ambos naturales de Málaga: Gregorio Juárez Monge y Francisca Soto Ramírez. Localizar a estas personas era complicado, pero tras una ardua tarea de investigación en el padrón de Málaga, se obró el tan ansiado milagro y apareció un supuesto nieto de El Planeta, el ya citado Gregorio Juárez Monge. Al localizar su partida de nacimiento en Málaga comprobamos con regocijo inenarrable que su abuelo materno se llamaba Antonio y que era natural de Cádiz. Ya sabíamos que el Planeta se llamaba Antonio Monge.
«Es difícil demostrar que el Tío Gregorio fuera el padre de El Planeta, aunque es muy posible que lo fuera, porque en aquellos años no había en Cádiz muchos carniceros con ese nombre»
El siguiente paso fue localizar a la madre de Gregorio Juárez, que resultó llamarse Dolores Monge Vara, esto es, una hija del Planeta a la que localizamos casándose en la Parroquia de San Juan de Málaga con el malagueño José Juárez García, de 32 años de edad. Como vivían en la calle San Juan, nº 1, de Málaga, el padrón de 1852 nos aportó el segundo apellido del Planeta, Rivero, y el nombre y los dos apellidos de su esposa, María Vara Gallardo, que también era gaditana.
Demófilo acertó cuando aseguró que el mítico cantaor era natural de la trimilenaria Cádiz. Joselito Pantoja y José Carlos de Luna tampoco iban muy descaminados, porque el Planeta abandonó pronto la ciudad de Cádiz, después de casarse en Cádiz en 1808 y de tener a su último hijo, Tomás, para afincarse en Málaga sobre 1836, donde casó a varios de sus vástagos y donde murió ya anciano para la época.
De nombre, Antonio Monge Rivero El Planeta
Antonio Monge Rivero El Planeta era natural de la ciudad de Cádiz, en la que nació en 1790. Pudo nacer en la calle del Marzal –hoy Vea Murguía–, en el antiguo Barrio de San Antonio. Hijo de Gregorio Monge y de Francisca Rivero, que también eran naturales de Cádiz. Se casó con la también gaditana María Vara Gallardo, en 1808, siendo ambos muy jóvenes. Tuvo al menos siete hijos en Cádiz, entre 1810 y 1834, que fueron, en este orden, Antonia, Tomasa, Francisco, Dolores, María Dolores, María Magdalena y Tomás. Es probable que tuviera algunos más y que murieran. De hecho, en el padrón de habitantes de Málaga no aparecen los dos primeros hijos del matrimonio.
No sería muy descabellada la idea de que el Planeta fuera hijo del Tío Gregorio, al que describió metido en fiesta campera el también gaditano José Cadalso en sus Cartas Marruecas, en el último tercio del siglo XVIII. Estas cartas se publicaron por primera vez en el Correo de Madrid en febrero de 1793 y cuatro años más tarde aparecieron en un libro editado por la imprenta Sancha. El militar no llegó a verlas publicadas porque Cadalso, que había nacido en Cádiz en 1741, acabó sus días en 1782. Nos dice este autor que el tal Gregorio era un gitano carnicero de Cádiz, que, además, estuvo en la cárcel por apuñalar a alguien en la feria de esta ciudad, lo que podría explicar la famosa seguiriya del Planeta, “para que saque a mi pare, que verlo camelo”. Lógicamente, es muy difícil poder demostrar que el Tío Gregorio fuera el padre de nuestro cantaor, aunque es muy posible que lo fuera, porque en aquellos años no había en Cádiz muchos carniceros con ese nombre, según el censo de gitanos de la época.
«Antonio Monge El Planeta era tatarabuelo materno del cantaor sevillano Manolo Caracol, como cantaba a los cuatro vientos el poema del poeta arcense Antonio Murciano»
Como ya hemos indicado, Dolores Monge, una de las hijas del Planeta, se casó en Málaga, en la Parroquia de San Juan, con el malagueño José Juárez García, el 31 de octubre de 1852. El Planeta vivía entonces en la calle San Juan, nº 1, con su esposa y dos de sus hijos. Su hija Dolores tuvo una hija, Antonia Juárez Monge, el día 6 de agosto de 1853, en la calle Santos de Málaga, nº 19, que se bautizó en la Parroquia de San Juan el día 12 de agosto de este mismo año. En 1854 tuvo a Gregorio, en la calle Santos también, quien se casó en Málaga con la malagueña Francisca Soto Ramírez, nacida en esta misma ciudad en 1855. Una hija de estos, la también malagueña Dolores Juárez Soto, se casó primero con un malagueño que resultó muerto por herida de arma blanca en la ciudad de Málaga, al mediar en una reyerta. La joven viuda puso un negocio de lavandería y planchado de ropa, y en él conocería a Manuel Ortega Fernández, Caracol Viejo, con el que en julio de 1909 tuvo a Manolo Caracol en la calle Lumbreras de Sevilla, en la Alameda. Por tanto, Antonio Monge El Planeta era tatarabuelo materno del cantaor sevillano, como siempre aseguró el artista y cantaba a los cuatro vientos el poema del poeta arcense Antonio Murciano:
Tataranieto de El Planeta,
Bisnieto de Curro Durse…
* Continuará…
Imagen superior: Única imagen que existe de El Planeta. Es obra del dibujante Francisco Lameyer, de El Puerto de Santa María. Hay quien dice que no es El Planeta, sino el famoso bandolero Diego Corrientes. Lameyer no pudo conocer al bandido de Utrera, porque nació 34 años después de que lo ahorcaran.
Francisco Zapata Salas 13 abril, 2020
Por fin Manuel Bohorquez. Enhorabuena por tu trabajo y muchas gracias por tu dedicación al flamenco. Ánimo fuerza y mucha suerte en estos momentos tan difíciles…
Manuel Bohórquez Casado 14 abril, 2020
Gracias, Francisco. Un abrazo.
Jose Luis Palma Suarez 14 abril, 2020
Gracias por todo ese trabajo de investigacion.
Cuanto me hubiese gustado comentar este tema con mi padre que era un gran aficionado desgraciadamente ya no esta entre nosotros, estoy seguro que le hubiese emocionado saber que por fin se le ponia nombre y apellidos al primer cantaor del que se tenia constancia.
Reitero mi agradecimiento y por favor nunca deje de investigar somos muchos a los que nos interesa la histaria del Arte mas grande del mundo » EL FLAMENCO»
Manuel Bohórquez Casado 14 abril, 2020
Gracias, amigo. Un abrazo.
Ramona 14 abril, 2020
.el flamenco tiene mucha rama gitana, que es lo que a mi me interesaba de este apartado.
Bien….entonces el flamenco desde los principios es del gitano y andaluz.
Entonces por que ahora lo niegan? Y dice que no tiene dueño?
Manuel Bohórquez Casado 14 abril, 2020
En efecto, el flamenco tiene mucho, mucho, de los gitanos andaluces, no de los de Cuenca. Es un arte nacido y desarrollado en Andalucía. Gracias.
Francisco 14 abril, 2020
Grande Manuel Bohórquez. Ya sabemos por ti al primer cantaor de flamenco de la historia . Buufff como me gustan estos relatos que nos ofreces. Oleeeeeee tu.
Manuel Bohórquez Casado 14 abril, 2020
Gracias, Francisco. Un abrazo.
Juan Pérez piña 14 abril, 2020
Gracias por esta laboriosa recuperación de este arte y de sus posibles inicios del cante.felicidades
Manuel Bohórquez 15 abril, 2020
Muchas gracias, amigo Juan. En eso estamos. Un abrazo.
Jose sanchez acosta 14 abril, 2020
Sensaciónal me ha encantado porque un gran aficionado al mundo flamenco ya que por mi vena corre el apellido Soto y Fernández y soy de Jerez del barrio San Miguel
Manuel 14 abril, 2020
Muchas gracias a don Manuel Bohórquez por su laboriosa investigación para darnos información de el primer cantaor flamenco gitano de la historia.yo como aficionado te lo agradezco infinitamente un abrazo y Dios te de mucha salud para poder deleitarnos con tu trabajo de investigación que es de primera categoría un abrazo amigo.
Jose Antonio 15 abril, 2020
Buenas.
Muchas gracias por este maravilloso documento.
Y que en los conservatorios andaluces no haya gente como tú (ya vimos que hicieron con Manolo Franco o Niño de Pura) u otros compañeros que estáis dignificando al Flamenco a través de una labor rigurosa… qué pena.
Un fuerte abrazo
Manuel Bohórquez Casado 2 diciembre, 2020
Muchas gracias, saludos.
Luis A. Presa Cernuda 1 diciembre, 2020
enhorabuena maestro,Manuel, por su trabajo de investigación y la labor que promueves en bien del arte flamenco. Como siempre es un gran placer seguir sus reseñas y escritos de investigación. Un saludo cordial desde Valladolid, con mi más profundo respeto y admiración.
Manuel Bohórquez Casado 2 diciembre, 2020
Gracias, amigo Luis. Es un placer escribir para lectores tan amables y amantes de lo nuestro. Un abrazo.
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