Ayer jueves, día 5 de julio, los compañeros de ExpoFlamenco Luis Pérez y Quico Pérez-Ventana estuvieron en los Cursos de Verano de la Universidad Pablo de Olavide, de Carmona (Sevilla), donde Merche Esmeralda e Inmaculada Bustos iban a hablar de algo relacionado con el tema del curso, el papel de la mujer en el flamenco. Una de las participantes, Ángeles Cruzado, se sorprendió de verlos allí porque, según les dijo, en ExpoFlamenco no estamos muy de acuerdo con el movimiento del feminismo jondo, y no es cierto.

Soy yo, y no el portal, quien discute ciertos aspectos de este movimiento. Es verdad que soy el director de contenidos, pero cada colaborador tiene total libertad para opinar lo que quiera, como es el caso de Luis Pérez, y para ir también donde quiera, como fue el caso de ayer. Fui invitado y no acudí por dos razones: porque aún no puedo caminar y porque no voy a ir jamás a un curso sobre la mujer en el flamenco, en el que dejan fuera al hombre. Y cuyo director, Ildefonso Vergara, declaró a un conocido medio que “el flamenco era un mundo de hombres”, cuando eso no es cierto. Nunca ha sido el flamenco un arte exclusivamente de hombres, ni lo es en la actualidad, ni lo va a ser jamás.

En ExpoFlamenco llevamos una línea tanto en la información como en la opinión y hay total libertad para llevar a cabo las dos cosas. Por tanto, es inadmisible que Ángeles Cruzado se sorprendiera de ver en el curso a Luis Pérez y Quico Pérez-Ventana. Fueron porque, en efecto, nos interesaba el curso, como nos interesan todos en donde se defienda el flamenco. Somos un portal comprometido hasta el tuétano con este arte y una referencia en la información y la opinión. Un portal en el que Ángeles Cruzado ha escrito un artículo sobre la mujer en el flamenco, que yo mismo le pedí, por cierto, porque ella se especializó en este asunto. Dijo lo que quiso y no se le tocó ni una coma porque aquí respetamos la opinión de todo el mundo, pero sobre todo la de los colaboradores.

El tema de la mujer en el flamenco está en su máximo apogeo, es actualidad y nosotros damos información y también opinamos. Seguramente nos habremos equivocado alguna vez, pero tengan la seguridad nuestros lectores de que habrá sido eso, un error, no intención de manipular ni de coartar la opinión de nadie. No entiendo el arte flamenco sin el papel de la mujer y sería un contrasentido intentar siquiera restar valor a lo que han aportado a lo largo de la historia no solo las artistas, sino las aficionadas, escritoras o investigadoras.