Doctora ‘honoris causa’
La Universidad de Sevilla ha investido doctora honoris causa a la cantaora Carmen Linares, que es natural de la ciudad minera de Jaén, aunque se hiciera artista en Madrid. Nunca la US había concedido este honor a ningún artista flamenco, siendo Sevilla madre de grandes artistas.
La Universidad de Sevilla ha investido hoy miércoles 15 de marzo doctora honoris causa a la cantaora Carmen Linares, que, como su nombre artístico señala, es natural de la localidad minera de Jaén, aunque se hiciera artista en Madrid. Nunca la US había concedido este honor a ningún artista flamenco, siendo Sevilla no solo una de las principales cunas del arte jondo, sino madre de grandes artistas. Ninguno ha merecido el honor que se le ha concedido a Carmen Pacheco Rodríguez, la cantaora linarense. No es que no lo merezca, pero llama la atención que jamás se hayan acordado del flamenco para estas distinciones, con la cantidad de artistas que hemos dado en las tres facetas: cante, baile y toque.
«Sevilla ha sido siempre muy mala madre para sus artistas flamencos. Empezando por la Universidad, donde ni siquiera hay una cátedra de flamencología en condiciones»
Solo por encima, la Niña de los Peines, Manuel Vallejo, el Niño Ricardo, Manolo Caracol, Pepe Marchena, Antonio Mairena, Antonio el Bailarín, Matilde Coral, Cristina Hoyos, Merche Esmeralda, María Pagés, Manuela Carrasco, etcétera, etcétera. Sigue viva la maestra del baile sevillano Matilde Coral, conocida universalmente por su magisterio y por la labor de tantos años en la dignificación del flamenco. Y está ahí la bailaora y coreógrafa más importante de los últimos años, la trianera María Pagés, sin ninguna duda nuestra artista flamenca más internacional. La tienen en cuenta fuera de Sevilla, donde le concedieron el Premio Princesa de Asturias, y no en su tierra. Al menos, no en esta ocasión.
Sevilla ha sido siempre muy mala madre para sus artistas flamencos. Empezando por la Universidad, donde ni siquiera hay una cátedra de flamencología en condiciones, como tienen las de Cádiz, Córdoba o Málaga. Sevilla no pinta ya casi nada en el mundo del flamenco. Duele decirlo, pero es así. Lo de nombrar doctora honoris causa de la Universidad de Sevilla a Carmen Linares ha sido promovido por el feminismo flamenco. No le daría más bombo.
Imagen superior: Facebook Universidad de Sevilla
