Cuando escuché cantar la primera vez a Juan Villar, a finales de los setenta, supe enseguida que formaría un lío en los festivales, y así fue. Era una voz nueva, de Cádiz, que venía de las raíces más jondas de la Tacita de Plata. A pesar de que cuando comenzó a sonar con fuerza había treinta o cuarenta figuras del cante, Juan supo ganarse un sitio en los festivales veraniegos del sur de España cantando por bulerías como se había hecho muy pocas veces, con un sello único y una jondura desconocida. Recuerdo que una de esas noches que cantó para llevarlo a hombros al Barrio de la Viña, Camarón le comentó a Jesús Antonio Pulpón: “A ver qué hago yo ahora”.

Pero no basó solo su revolución en las bulerías, sino en las alegrías, los tientos y las soleares de su tierra. Por soleá hacía a veces cosas increíbles, cantes cortos bañados de una flamenquería que enamoraba. Y cantaba para bailar de una manera que pocas veces se ha destacado. La primera vez que le escuché cantar al baile fue a Manuela Carrasco y no recuerdo haber visto mejor a la Diosa del baile gitano. Juan tenía entonces una fuerza y un compás incomparables. Farruco decía de él que te metía el compás en las tripas.

Cádiz ha dado al flamenco tanto y tan grande –qué pena que sus gobernantes no le den importancia– que cada calle o plaza debería llevar el nombre de alguna figura: El Planeta, Lázaro Quintana, La Mejorana, Enrique y Gabriela Ortega, El Raspao, El Mellizo, Patiño, Fosforito, El Caoba, Aurelio Sellés, Manolo Vargas, La Perla, Chano Lobato, Juan Villar… Esto sin contar con Jerez, El Puerto, Puerto Real, Sanlúcar o Algeciras. Juan José Villar Jiménez, que así se llama este gran maestro del cante gaditano, es uno de los clásicos y su voz está grabada a fuego en la historia del cante.

Celebro que el próximo sábado 6 de julio vaya a ser homenajeado en la localidad gaditana de Conil, en un festival –el Festival Flamenco Atún Rojo de Almadraba– que en solo dos ediciones, contando con la del sábado, parece haberse consolidado. Si el pasado año fue homenajeado el maestro Rancapino, este le va a tocar a Juan Villar. Y en ExpoFlamenco lo celebramos a compás.

Foto Juan Villar: Canal Andalucía Flamenco