El flamenco y los medios de comunicación
Echo de menos buenos programas de radio y televisión en Andalucía. Cuando empezaba a hacerle la corte al arte jondo contábamos en Sevilla con programas como los de José Luis Montoya, Miguel Acal, Paco Herrera y Emilio Jiménez Díaz, y la magnífica Tertulia Flamenca de Radio Sevilla.
Una de las cosas que más echo de menos como aficionado, al margen de mi profesión de crítico, son buenos programas de radio y televisión en Andalucía. Cuando empezaba a hacerle la corte al arte jondo, en los setenta, contábamos en Sevilla con programas como los de José Luis Montoya, Miguel Acal, Paco Herrera y Emilio Jiménez Díaz, sin olvidar aquella magnífica Tertulia Flamenca de Radio Sevilla, dirigida por Rafael Belmonte, el hermano del gran torero, en la que solían participar con frecuencia Antonio Mairena, Matilde Coral, Palomino Vaca, Luis Caballero y destacados artistas como Naranjito de Triana o Manuel Márquez El Zapatero.
Estos programas eran verdaderas escuelas de flamenco y buenas tribunas de opinión. En lo referente a la prensa escrita, es justo decir que todos los periódicos de Andalucía tenían su sección de flamenco y sus críticos, que era otra escuela. Los citados Miguel Acal y Emilio Jiménez Díaz eran entonces los críticos más influyentes, además de Juan Luis Manfredi y José Antonio Blázquez, entre otros. Los medios de comunicación iban a los festivales y a las peñas, y por supuesto a los teatros. Televisión Española hizo la serie más famosa jamás grabada, Rito y geografía del cante y Rito y geografía del baile, que hicieron historia. Y Pepe Sollo tenía también su programa en la sucursal andaluza, que era un espacio de actualidad, con entrevistas, presentaciones de libros y discos y reportajes sobre festivales de verano.
Fue, sin duda, la época de oro de la crítica flamenca, con sus luces y sus sombras, sus virtudes y defectos. Se crearon prestigiosas revistas como la de la Cátedra de Flamencología de Jerez, la de la Tertulia Flamenca de Ceuta, Sevilla Flamenca y Candil, en Jaén, entre otras de menor influencia. Y había críticos en toda Andalucía, como Juan de la Plata, Agustín Gómez, Gonzalo Rojo o Emilio Fuentes. ¿Qué ocurre en la actualidad? Pues que los medios andaluces han dejado de tener interés por el flamenco, en general, aunque haya críticos en la mayoría de los diarios y algún que otro programa de radio.
Hay que destacar, porque es de justicia, el programa Nuestro flamenco, de Radio Nacional, dirigido por José María Velázquez desde hace casi treinta años, y el de Manuel Curao en Canal Sur Radio. Hay otros, claro, pero no del peso que un arte como el flamenco precisaría, sino pinchadiscos o espacios locales, de escasa cobertura. Las grandes empresas estatales no quieren saber nada. En Radio Nacional, por ejemplo, se trata mucho mejor el jazz, el rock o la música clásica, que el flamenco, siendo la gran música del país. No hablemos de la Cadena Ser y la Cope.
Que estas grandes empresas de radio no tengan un programa diario que se pueda escuchar en toda Andalucía es poco menos que una vergüenza. Un programa de actualidad, con entrevistas, presentaciones de discos y libros, conducido por alguien con prestigio. Canal Sur Televisión ha tenido varios programas, algunos tan lamentables como La Venta del Duende. Y Canal Sur Radio tiene Flamenco Radio, que fue una magnífica idea del periodista y fotógrafo Paco Sánchez. Veinticuatro horas de flamenco, diariamente, con buena audiencia en todo el mundo, aunque esté falta de contenidos interesantes.
No podemos acabar el artículo sin citar a Tere Peña, Teo Sánchez o José María Castaño, como conductores de programas de radio muy seguidos. Y, sobre todo, a aquellos compañeros y aquellas compañeras que tienen su espacio en televisiones y emisoras de radio modestas, la mayoría en los pueblos, que desarrollan una buena labor. Por último, es justo destacar también la extraordinaria labor de algunos portales y blogs de Internet, en todo el mundo. Solo hace falta que las grandes cadenas estatales y privadas se comprometan de verdad con un arte que cuenta ya con centenares de miles de seguidores en todo el planeta.
Pedro Ruiz Pacheco 15 mayo, 2019
Afortunadamente con las nuevas tecnologías tenemos algunas otras opciones, entre ellas los podcasts, que además permiten volver a recuperar archivos sonoros históricos.