Jerez y el mundo flamenco vuelven a vestirse de luto en diciembre. En la mañana del 27 de diciembre ha fallecido el cantaor Antonio de los Santos Bermúdez ‘Agujetas’, hijo del gran Manuel Agujetas. Antonio llevaba años soportando una enfermedad que fue menguando sus fuerzas y sus apariciones públicas, sobre todo tras la pandemia.

El de la Plazuela ha sido hasta su muerte un icono de los soníos negros, pues heredó lo mejor de sus antecesores como su padre y su abuelo Agujetas El Viejo, de ahí que en sus recitales expusiera constantemente una serie de estilos prácticamente en desuso en una apuesta por la conservación de lo que en su día cantaron grandes aficionados como Juan Ramírez o Farrabú.

Desde muy joven acompañó a su padre a festivales y recitales, compartiendo con él incluso alguno de ellos. Curiosamente, hace antes de morir Manuel, lo catalogaba como la “nueva promesa del cante”, aun habiendo demostrado su calidad desde décadas atrás.

No tuvo una vida precisamente fácil, Antonio soportó las vicisitudes de una época, la de los 80, de excesos y vaivenes, como él mismo explicaba en algunas de sus entrevistas. Pero sin ánimo de entrar en ello, el cantaor destacaba por su profundidad expresiva y por su impactante capacidad transmisora.

En los últimos años estuvo en Madrid, en la Bienal de Sevilla 2016, mismo año que estaría en la Fiesta de la Bulería de Jerez, en algunas peñas de su cuidad como La Bulería, Los Cernícalos o La Zúa, peña ésta en la que cantó por última vez ante el público el pasado mes de octubre. En el Festival de Jerez compartió tarde con Juan Lara en el Palacio de Villavicencio, en marzo de 2017. Más tarde pasaría por los Viernes Flamencos de su cuidad con la Peña La Bulería, año 2018, para posteriormente ser reclamado en reuniones privadas que aficionados de distintos puntos de Andalucía organizaban para escucharlo.

En el año 2022 acudió a Benalmádena, festival que estuvo dedicado a la memoria de su padre, cuyo viaje ida y vuelta compartimos en el coche.

Descanse en paz.