Miguel Poveda (Badalona, 1973) se encuentra en el momento más dulce de su carrera profesional. Tras recibir en junio un disco de oro por su doble álbum El tiempo pasa volando, el artista comenzó una gira internacional con ese mismo título en el Teatro Real de Madrid. El propósito de esta gira no es más que celebrar los treinta años que lleva subido a los escenarios. Como él mismo ha anunciado en su web, «mis 30 años de música».

El músico, catalán de nacimiento y sevillano de adopción, combina su faceta de cantaor de flamenco clásico y tradicional con diferentes incursiones en otras músicas, como la copla andaluza, los boleros o la canción lírica o melódica. Esa voluntad de no ceñirse a un estilo musical concreto le ha valido tantos éxitos como críticas desde los sectores más conservadores del arte jondo.

El espíritu de la gira está implícito en esa trilogía que conforman los dos CD de su último disco El tiempo pasa volando y su anterior EnLorquecido, su obra más comprometida y lírica sobre el poeta Federico García Lorca. Son pues tres horas de concierto, perfectamente diferenciadas. El segundo de los cedés del doble álbum es un disco cabal de cante jondo, donde encontramos desde bulerías por soleá, seguiriyas, tientos tangos o fandangos, hasta guajiras, granaínas, cantes del Piyayo, la malagueña del Canario o una murciana.

El primer CD de El tiempo pasa volando es un homenaje a la música que forma parte de la infancia y juventud de Miguel. Para entendernos, esa época lolaila de las cintas de casete en las gasolineras y de la radio en su barrio de Barcelona. Los Chichos, Los Chunguitos, Parrita, Lole y Manuel, Tijeritas, Chiquetete, Los Panchos o José Luis Rodríguez El Puma.

Tras su reciente recital en Bogotá el 11 de septiembre, las próximas citas de la gira son las siguientes:

• 6 octubre – Donostia
• 11 octubre – Cartagena (Murcia)
• 15 noviembre – Gran Canaria
• 16 noviembre – Tenerife
• 28, 29, 30 noviembre – Cádiz
• 10 diciembre – Barcelona
• 14 diciembre – Sevilla
• 23 diciembre – Madrid