El miércoles 20 de mayo, los Reyes de España mantuvieron una videoconferencia con destacados representantes de la música de España –David Bisbal, José Mercé y Miguel Poveda–, con quienes hablaron sobre el impacto de la pandemia y las perspectivas de futuro. Tanto Mercé como Poveda son socios fundadores de Unión Flamenca, por lo que aprovecharon para informar a los Reyes de la reciente creación de la Asociación de Artistas Profesionales del Flamenco. En este sentido, los cantaores les trasladaron los principales objetivos de Unión Flamenca: ser la voz del colectivo de artistas profesionales del flamenco y trabajar en la creación de un marco jurídico que regule el sector a niveles fiscal y laboral.

José Cepero, director general de Unión Flamenca, ha considerado este hecho como “un hito histórico”, ya que “por fin, y con la escucha activa de Sus Majestades los Reyes” el colectivo de artistas profesionales del flamenco cuenta con “una voz representativa que ha llegado a ser escuchada en La Zarzuela”. Por ello, el representante de Unión Flamenca ha querido agradecer “la atención e interés que mostraron Sus Majestades durante el encuentro” hacia la asociación y las propuestas trasladadas por dos de sus socios fundadores. “Deseamos de corazón que este sea el primer paso en el trabajo de Unión Flamenca con otras instituciones, porque son muchas las esperanzas puestas en este proyecto por personas que lo están pasando realmente mal”, ha apostillado.

Mesa permanente del Flamenco

Unión Flamenca ya ha puesto de manifesto la pertinencia de crear una Mesa Permanente del Flamenco, órgano mixto de trabajo en el que estén presentes tanto las administraciones públicas como los representantes legítimos del sector y así poder delimitar la situación real del flamenco y diseñar medidas adaptadas a la misma.

Asimismo, Unión Flamenca ha presentado una serie de modificaciones legales tanto a nivel laboral como fiscal, porque entiende que «el flamenco solo puede protegerse si se protege a las personas que lo hacen posible, y para ello es necesario crear un nuevo marco legislativo que regule el sector».

“El flamenco es una realidad compleja de la que se ha estudiado mucho sus facetas artística, cultural y antropológica, pero poco la económica”, ha indicado Cepero. El director general afirma que no existen estudios fiables del tejido empresarial del flamenco y del dinero y el empleo que genera no solo en espectáculos, discos o conciertos, sino en otras industrias vinculadas como el diseño textil, complementos y zapatería, los instrumentos musicales, la producción audiovisual, la formación o, por supuesto, el turismo, la hostelería y la restauración.