El legado Morente perpetúa en el Cante de las Minas
Estrella Morente enmudece la Catedral del Cante en un concierto que recordó la obra de su padre y mostró cómo el cante jondo se engrandece en la personalidad de su voz
Entradas agotadas. La noche en la que Estrella Morente volvía a la Catedral del Cante prometía ser inolvidable, y más cuando a última hora de la mañana se anunciaba que el aforo estaba completo. Una muestra de las ganas que tenía el público de La Unión de encontrarse con una de las máximas representantes del cante jondo.
Se subió a un escenario ya conocido para ella, en el que se siente como en casa, aunque afirmó que era “como la primera vez”, agradeciendo al público su “asistencia, silencio y escucha”. “He cantado en muchos sitios, pero esta siempre será la Catedral del Cante”, confesó ante un público que se volcó con ella y su viaje por un flamenco tradicional y estudiado, por el talento que corre por sus venas, permitiéndose la libertad de improvisar y dejarse llevar por las sensaciones del momento, aportando matices personales que hacen que el flamenco suene único en su voz.
Fluyó con los cantes de Levante, que no podían faltar en su cita con La Unión, con De noche y día, la cartagenera de Chacón, que continuó con taranta, Tú la joya y yo el joyero, de Manuel Vallejo, haciendo un guiño también a Jacinto Almadén, acabando con una “creación de la casa Morente”, poniendo voz a la elegía de Ramón Sijé de Miguel Hernández, que dedicó “a todos los mineros de esta tierra”. “Mi padre, enamorado de los cantes de Levante, me los enseñaba de niña”, contaba con la intimidad de quien se siente entre amigos, aprovechando para citar a Pencho Cros y Encarnación Fernández, “tesoros por Levante”. La presencia del legado de Enrique Morente se palpaba en el ambiente.
La caña fue el palo elegido para abrir el espectáculo, mostrando el virtuosismo de su voz con ciertos toques de fusión, que continuó añadiendo ritmo con fandangos de Granada y tangos. Con la Habanera imposible de Carlos Cano le cantó a Granada: Granada es como una rosa/ Más bonita que ninguna/ Que se duerme con el Sol /Y florece con la Luna.
Una soleá de su padre, Una espina clavá, y La noche de mi amor, que adaptó cantando a La Unión, pusieron el broche de oro en una tierra “cuna de artistas muy grandes”. “Me voy con el corazón lleno de que hayáis disfrutado un poco lo que lo he hecho yo esta noche”, dijo despidiéndose, interpretando a capella Volver ante un público en pie que agradeció su entrega en una tierra que siente como suya.
Comienza el concurso
Comienza el concurso más famoso del mundo. La primera semifinal empezará a subir a los aspirantes de los máximos galardones del Festival a las tablas del Antiguo Mercado Público desde las 22 horas. Actuarán María Ángeles Cruzado Garrido (Huelva), Juan José Heredia Santiago ‘El Niño Solo’ (Granada), Aroa Cala Luque (Cádiz) y José León Márquez ‘José de la Mena’ (Sevilla) en la categoría de cante; en baile concursarán Dolores Pérez González ‘Lola Pérez’ (Córdoba) y Francisco Vílchez Jiménez ‘Fran Vílchez’ (Madrid); en guitarra, Mercedes de Rocío Sanguiao Horneros ‘Mercedes Luján’ (Lorca) y Manuel Fernández Heredia (Granada); y en instrumentación Raúl Pérez Fernández (Cartagena) al piano.
Por la mañana, a las 13 horas, se inaugurará con el Parque Municipal Encarnación Fernández, en homenaje a la doble Lámpara Minera. También habrá eventos durante la tarde dentro de la Agenda Cultural en el Salón de Actos de la Casa del Piñón. Desde las 20:00h se celebrará la mesa redonda El Flamenco en Madrid, en la que participarán el periodista, escritor y productor especializado en flamenco, José Manuel Gamboa; el director del portal deflamenco.com, Rafael Manjavacas; y el presidente del Círculo Flamenco de Madrid y especialista en patrimonio sonoro, Carlos Martín Ballester. El evento estará moderado por Francisco Paredes, flamencólogo y miembro del jurado de la 62ª edición del Festival Internacional del Cante de las Minas.