Jerez pierde la voz de Juan Romero Pantoja El Guapo
Juan Romero Pantoja El Guapo fue nombrado Saetero Mayor de la Semana Santa de Jerez por la Cátedra de Flamencología y, hasta hace pocos años, podía escuchársele cantar por este estilo al Señor de la Misericordia de su barrio adoptivo de La Plata.
Juan Romero Pantoja El Guapo ha muerto en la mañana del 23 de agosto de forma natural. Nació en el barrio de Santiago de Jerez de la Frontera en el año 24 del siglo pasado. Miembro de una amplia familia de artistas, hermano de Romerito de Jerez y tío de Periquín Niño Jero, se dedicó profesionalmente al arte en su juventud formando parte de los cuadros flamencos que se organizaban en las bodegas para los turistas o incluso para los propios dueños de las mismas, conocidos entonces como ‘señoritos’.
Compartió ratos e incluso escenarios con Juan Talega, Antonio Mairena o fue amigo de Pepe Pinto, a quien profesó una gran admiración que pudo demostrar en un fandango recogido en el disco Quimeras del Tiempo – Recuerdos de Ezequiel Benítez.
A pesar de que por entonces tuvo un gran éxito, llegando a viajar a países europeos como Inglaterra o Irlanda, prefirió buscar la estabilidad familiar gracias al trabajo en la Bodega Garvey, no como cantaor sino como personal fijo entre botas y vinos.
«Si por algo será recordado este insigne vecino del barrio de La Plata será por sus saetas. No había Semana Santa en la que su personal eco no saliera por los balcones con más prestigio de Jerez»
Destacaba su metal fino y potente por alegrías y fandangos, así como por bulerías. Pero si por algo será recordado este insigne vecino del barrio de La Plata (cerquita de Santiago, donde se trasladó hace décadas) será por sus saetas.
No había Semana Santa en la que su personal eco no saliera por los balcones con más prestigio de Jerez, además de por supuesto en la calle de forma espontánea. Siempre elegante, con corbata y pañuelo en mano, era capaz de interpretar este difícil estilo a cada imagen venerada con una letra dedicada a la misma. Pues mientras que otros grandes saeteros tenían en su repertorio tres o cuatro bien manidas, él sorprendía constantemente con unas composiciones novedosas y certeras identificando su expresión con la del paso de misterio o la Virgen en cuestión.
Fue nombrado Saetero Mayor de la Semana Santa de Jerez en 1990, siendo más tarde reconocidos otros nombres como Manolo Sevilla, Sotito de Jerez, María José Santiago y Ángel Vargas.
Como persona era cabal, educado, humilde y cercano. Uno de esos grandes gitanos de Jerez de los que nadie puede tener una mala palabra. Descanse en paz.
Fotos: Facebook Cátedra de Flamencología de Jerez