El Festival Flamenco Porrina de Badajoz, que patrocina la Diputación de Badajoz con la colaboración de la Federación Provincial de Peñas Flamencas de la provincia de Badajoz, regresa tras la cancelación del pasado año debido a la pandemia, para celebrar el sábado 3 de julio –21 horas– su decimonovena edición con un atractivo cartel que incorpora algunas de las voces más reconocidas del cante actual y con el que pretende situarse de nuevo como una de las citas culturales imprescindibles para los aficionados y aficionadas extremeños.

Así, el programa contará con la presencia de Pedro El Granaíno junto a la guitarra de Antonio Patrocinio. Además de los cantaores extremeños Nane Ramos y Edu Hidalgo, dos de las voces más representativas y prometedoras del cante flamenco y la bailaora Fuensanta Blanco, que estará acompañada del cante de Ismael Solomando y Vicky González. Las guitarras correrán a cargo de Sara Castro, Manolín García y Antonio de Patrocinio, y las palmas de Dani Bonilla y Roberto Jaén.

Además de acercarse al público regional, este año la organización ha querido estrechar lazos con Andalucía para la promoción y difusión del arte jondo y reforzar el importante papel que tiene esta tierra en el desarrollo del flamenco, tal y como ha comentado el diputado delegado de Cultura y Deportes de la Diputación de Badajoz, Francisco Martos Ortiz, en la rueda de prensa que ha tenido lugar el martes 22 de junio en la sede del Instituto Andaluz del Flamenco y que ha contado con la presencia de Emilia Parejo, directora del Área de Cultura, Juventud y Bienestar Social de la Diputación de Badajoz; Manuel Candalija Valle, jefe de Servicios del área de cultura y deportes de la Diputación de Badajoz; Sergio García Buzón, coordinador del área de flamenco de la Diputación de Badajoz; y Javier Rivera, director de Coordinación de la Agencia de Instituciones Culturales de la Junta de Andalucía.

En este sentido, Martos mostró el interés de la Diputación por promover, conservar y fomentar la riqueza patrimonial de la provincia, y más concretamente del flamenco, un arte “con un amplio arraigo social y cultural en todas las localidades de nuestra provincia” y que cuenta con una “impresionante nómina de artistas de primer nivel y un importante tejido de peñas y asociaciones flamencas, auténticos centros de gravitación de la cultura flamenca en nuestra provincia”. Asimismo, recordó que la institución, además del Festival Porrina de Badajoz, tiene en marcha el programa Pasión por el Flamenco, el Aula de Flamenco con la Universidad de Extremadura, y cursos y asignaturas de esta manifestación cultural en los conservatorios de la Diputación. En esta línea,

Durante la rueda de prensa se ha destacado también la importancia de la figura del artista que da nombre a la cita, José Salazar Molina, sin duda el cantaor pacense más internacional, así como la historia y la vinculación de esta tierra con lo jondo, posicionándola como ejemplo de conservación de estilos autóctonos como son los tangos o los jaleos extremeños, que durante el acto de presentación del festival en Sevilla interpretaron los artistas extremeños.

Como se anunció, el protagonista de la cita, que tendrá lugar este año en el Palacio de Congresos de Villanueva de la Serena (Badajoz) a partir de las 21 horas y con entrada gratuita, será El Granaíno, reconocido con el Giraldillo al cante en la pasada edición de la Bienal de Sevilla 2020 y una de las voces más reconocidas en el flamenco actual por la belleza de su metal y la frescura de su cante. Colaborador habitual de artistas de la talla de Vicente Amigo, Tomatito, Morente, Farruquito o Alejandro Sanz, el cantaor da el salto en solitario en 2013 y fragua a partir de ahí una prometedora carrera con éxito de crítica y público gracias a espectáculos como Maestros o Granaíno Jondo. En esta última, que traerá al Porrina de Badajoz, Pedro Heredia Reyes desvela su esencia más profunda con un recital flamenco cargado de jondura y emoción.

Representando el cante de la tierra estará el cantaor Edu Hidalgo (Badajoz, 1986). Procedente de una familia de tradición flamenca, Hidalgo va configurando su estilo escuchando a artistas como Mairena, Menese, Calixto Sánchez o Tomás Pavón y formándose con maestros como Arcángel, Rebollar o Paco Taranto en la Fundación Cristina Heeren. Así, se convierte en uno de los jóvenes cantaores más solicitados en los festivales y peñas flamencas del país y recibe importantes reconocimientos en prestigiosos concursos jondos. Además, recorre los teatros de todo el mundo, también acompañando a primeras figuras del baile como Antonio Canales.

También de Extremadura llega María del Carmen Ramos, conocida artísticamente como Nane Ramos, una de las cantaoras más destacadas del flamenco extremeño por su empaque y su fuerza interpretativa. Curtida en tablaos, academias y fiestas flamencas, la artista cursa sus estudios también en la Fundación de Arte Flamenco Cristina Heeren y desarrolla una avalada trayectoria recorriendo festivales de toda la geografía española e impartiendo conferencias, recitales y cursos de cante por toda Europa.

Por su parte, la protagonista en el baile será Fuensanta Blanco Sánchez-Córtes (Mérida, 1995). Formada en el Conservatorio Profesional de Danza Luis del Río de Córdoba, la artista recibe clases de las principales figuras de lo jondo, así como de la danza española y contemporánea. A pesar de su juventud, Fuensanta ha mostrado su arte en los principales festivales flamencos de Andalucía y Extremadura. Asimismo, ha formado parte del Centro Andaluz de Danza (con Rubén Olmo, Ana María Bueno, Miguel Ángel Corbacho y Rocío Coral como profesores) y ha participado en diversos espectáculos como el Amor brujo, el fuego y la palabra -a cargo de la Fura Dels Baus y con la colaboración especial de Marina Heredia y Esperanza Fernández-, con quienes ha recorrido las más importantes citas de danza.

Durante el acto, se recordó que recientemente, coincidiendo con el décimo aniversario del arte jondo como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por parte de la Unesco, el Diario Oficial de Extremadura (DOE) ha iniciado el expediente para declarar el Flamenco en Extremadura como Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Patrimonio Cultural Inmaterial. Un reconocimiento que sitúa a Extremadura como una de las zonas más importantes de la geografía flamenca en España y el mundo a través de la gran afición que se refleja en sus festivales, peñas y certámenes. Y que ya tienen en Andalucía los registros sonoros de La Niña de los Peines, la Fiesta de Verdiales, la Escuela Sevillana de Baile, la Escuela Bolera de Baile, la zambomba de Jerez y Arcos de la Frontera y el fandango.