El toreo y el cante siempre han ido de la mano como dos universos que convergen en uno solo. Se produce tal armonía que se pueden explicar casi con las mismas metáforas e imágenes lingüísticas uno y otro. En un principio, más o menos conocido, la gente del toro y la del flamenco eran los mismos protagonistas.
Ahondando en la creación artística que asola a unos y otros, hay un término que quintaesencia lo que sucede entre ambos: el quejío. Precisamente el título escogido por el escritor Jesús Soto de Paula para el libro que vino a presentarnos a nuestro Espacio. Según palabras del propio autor responde a ‘ese grito último, ese grito callado tan hermanado con el flamenco’.
Por supuesto, aprovechamos la ocasión para conversar con nuestro invitado de otros muchos temas. Por la profundidad de su eco, siempre es un verdadero placer escuchar su versión filosófica y vivencial del arte en su más variadas maneras.