Nada sería lo mismo sin la existencia de las peñas flamencas en Jerez de la Frontera. Podríamos decir, aumentando el espacio, que ocurre lo mismo en el resto de Andalucía. Pero las de Jerez, permitan ustedes, tienen un aspecto especial: son instituciones sin ánimo de lucro, hasta tal punto que todos los recitales ofrecidos son gratuitos para el visitante, con lo que conlleva de gastos para los socios que generosamente abren las puertas de sus sedes para bien del fomento de la cultura jonda. ¡Ojo! Que nadie crea que solo en la ciudad del Tío Pepe ocurre esto, también en otras de renombre como la Sociedad del Cante Grande de Algeciras, por ejemplo. Pero es cierto que cada vez más es habitual la incorporación en el cartel que anuncia cualquier ciclo o recital el epígrafe «donativo…tal», normalmente siendo una cantidad simbólica, que ayude a costear el asunto.
Es crucial el funcionamiento de estas entidades que forman parte del colectivo flamenco desde hace medio siglo. Los Cernícalos fueron los primeros en Jerez, siguiendo casi al mismo tiempo lo que ocurría en La Platería, Granada, y en la de Juan Breva, Málaga. Luego llegaron Peña La Bulería, El Garbanzo, Buena Gente, Tío José de Paula, Los Cabales (ya desaparecida), Los Juncales (apunto se está de derribar su sede en calle Nueva, por abandono), Chacón, Terremoto, Pescaero, Alconchel… Hoy día hay más de quince peñas en Jerez, algunas miembro de la Federación Local de Peñas, y otras no, las que menos. Están presente en la Navidad, organizando las tradicionales zambomba, en Semana Santa, dentro del ámbito de la saeta, en la Feria, con sus casetas en el Real (las más buscadas por los foráneos) y en el verano, participando en Viernes Flamencos y otros festivales locales. Pero sobre todo habría que destacar de todas ellas es la apuesta por las actividades en directo, en vivo, nunca mejor dicho. El recital en una peña tiene un carácter especial, cargado de magia y sentido, invitando al público al recogimiento y a la verdad, pues no existe guión ni equipo de iluminación que sirva de escaparate de distracción. El otoño, meses de octubre y noviembre, sobre todo, se ha convertido en fechas señaladas en rojos para estas asociaciones culturales cargadas de historia.
A estas alturas se conocen dos programaciones oficiales en peñas distintas, ¡y qué programaciones!. No es de extrañar que cualquier aficionado residente allende nuestras fronteras se extrañe sobremanera cuando ve nombres de primerísimo nivel en estos carteles. Por partes. Tío José de Paula celebra a partir del sábado 06 su 34 edición del Otoño Flamenco con nombres como Rancapino Chico (que vale verlo actuar en cualquier teatro 15 o 20 euros), Manuel de la Fragua, joven de la casa del Tío Juane, Antonio Malena, conocedor de los cantes como pocos, e Inés Bacán, matriarca del cante lebrijano. Cuatro sábados de octubre, puertas abiertas en la sede de Calle Merced, pleno barrio de Santiago. En noviembre continúa su curso de enseñanza de cante con tres ponencias dedicadas a la soleá de Juaniquí, por parte de José María Castaño y Los Caminos del Cante, la seguiriya de Tía Anica la Periñaca, por Estela Zatania, y los fandangos de José Cepero, por Antonio Conde González-Carrascosa.
Otra peña que apuesta, y fuerte, es Buena Gente. Ha presentado un ciclo de auténtica categoría, empezado el viernes pasado por Vicente Soto y Nono Jero, algo que se debe destacar ya que el hijo del Sordera, pese a ser muy jerezano, entiéndase, no suele trabajar demasiado en su tierra. El ciclo lo continúan otros nombres como Juan Villar, con Periquín ‘Niño Jero’, Esperanza Fernández y Miguel Ángel Cortés, José Valencia y Juan Requena, Jesús Méndez con Diego del Morao y Gema Moneo, Ezequiel Benítez y Paco León, y Macarena de Jerez y Diego del Morao. Estamos hablando de un programa más propio de una Bienal de Sevilla que de una peña jerezana que, como ya se decía más arriba, abre sus puertas a todo aficionado. Nace la reflexión pues, sobre la importancia transversal de éstas para con el turismo local y la economía de Jerez. Y la cuestión: ¿valora el gran colectivo social jerezano la importancia de sus peñas flamencas? ¿Y por parte institucional?
Aún está por ver qué han preparado los socios de la Asociación Cultural Flamenca Fernando Terremoto para Noviembre. Se puede nombrar, a forma de exclusiva, la presencia de algunos como José Carpio ‘Mijita’ o Ana de los Reyes. O lo que quieren mostrar un año más los de la Bulería en su XXVI Exaltación del estilo que da nombre a la entidad de San Miguel, o el Centro Cultural Flamenco Don Antonio Chacón, con su recital a puertas de la Navidad, o los Cernícalos, en el 50 aniversario de fundación… o el resto de ellas. Programaciones de teatros en locales de barrio… entonces, ¿no es el momento de poner una entrada-donativo para sufragar gastos como en otros lugares de la provincia o Andalucía? ¿no es mejor inculcar la costumbre del previo pago, sobre todo en el arte, a lo gratuito que carece de valor? Tema de actualidad y de debate en las peñas de Jerez, que todo hay que decirlo. Mientras tanto, disfruten de lo que ofrece, porque es impagable tales esfuerzos.