El Maestranza aguardaba hasta las manillas la nueva versión de Pineda que dirige Patricia Guerrero al frente del Ballet Flamenco de Andalucía. La obra de Lorca resuena como un mantra en la programación de La Bienal. Pero lejos de transitar en los tópicos manoseados o hacer incursiones superfluas con intereses comerciales, Guerrero aborda el mensaje con elegancia y solemnidad conformando una propuesta exquisita que cuida con esmero hasta el más mínimo detalle.
Se adentra en una dimensión de Mariana aguerrida y rebelde, tremendamente pasional que dibuja el retrato de una heroína liberal que llega a su muerte convirtiéndose en mártir. Lo configura en tres estampas prologadas por el Romance de Mariana Pineda, que ocurre mientras el público se acomoda, en las voces de trece mujeres abriendo las flores rojas de papel que amontonan en sus canastos. Pertenecen a la Asociación Cultural Cruz de Mayo del Albaicín.
La obra de Lorca resuena como un mantra en la programación de La Bienal. Pero lejos de transitar en los tópicos manoseados o hacer incursiones superfluas con intereses comerciales, Guerrero aborda el mensaje con elegancia y solemnidad conformando una propuesta exquisita que cuida con esmero hasta el más mínimo detalle.
Tres estampas articuladas en doce escenas hilvanadas en solución de continuidad argumentan una historia de lucha política contra el absolutismo y otra de amor. Con una coreografía muy trabajada y eminentemente grupal explica el poema dramático que exalta los valores libertarios de la protagonista. Todo ello con un mensaje de peso, densidad en la dramaturgia y acertadas transiciones. Pineda es una obra redonda cargada de simbolismo, con más danza que flamenco pero soberbia y cautivadora.
Hasta la soleá que Losa baila majestuosamente con despecho por el rechazo de Mariana no alcanza el discurso la intensidad suficiente. Una vez superado el momento, engancha y conmueve. Lo anterior figura como un preludio lento, casi aburrido, pero sirve de contexto para entender la trama que, por otro lado, necesita del conocimiento previo de la obra literaria para comprenderse en su justa medida. Aunque aquel que ignora este drama lorquiano intuye la lucha, el amor, el desamor, la persecución, el sacrifico y la muerte de una mujer insurgente que pugna por su libertad.
«Nos quedamos con la fragilidad de su nana cantada. Y con la extraordinaria belleza del paso a dos con Eduardo Leal. No he visto forma más hermosa de hacer el amor bailando sobre los maderos de un escenario»
Guerrero compone la escena en diferentes cuadros grupales, apostando por un baile rotundo y contumaz que ocupa el proscenio con movimientos marcados y sugerentes. Echamos en falta más intervenciones propias de Patricia como solista, dada la calidad de su baile, sutil y emocionante, cargado de expresividad. Nos quedamos con la fragilidad de su nana cantada. Y con la extraordinaria belleza del paso a dos con Eduardo Leal. No he visto forma más hermosa de hacer el amor bailando sobre los maderos de un escenario. También con la visceralidad de la sangre de una mujer empoderada, vestida de rojo, proclamando la autonomía de su voluntad. Con la imagen de las plañideras. ¿O tal vez era el rumor de la muerte que la acechaba? Con la escena final donde camina el espíritu cándido de Mariana, toda de blanco. Y con la música, por más que la relegaran justificadamente al foso.
Ficha artística
Pineda, del Ballet Flamenco de Andalucía
XXIII Bienal de Flamenco de Sevilla
Teatro de la Maestranza
23 de septiembre de 2024
Baile: Patricia Guerrero, Alfonso Losa, Eduardo Leal, Álvaro Aguilera, Agustín Barajas, Ángel Fariña, Araceli Muñoz, Claudia Calle ‘La Debla’, Hugo Aguilar, Lucía Fernández ‘La Bronce’, María Carrasco, Pablo Egea, Sofía Suárez, Jasiel Nahim, Blanca Lorente y Cristina Soler
Cante: Amparo Lagares, Manuel de Gines y Sergio el Colorao
Guitarra: Jesús Rodríguez, José Luis Medina y Dani de Morón
Percusión: David ‘Chupete’ y Agustín Diassera
Clarinete: Isabel Junquera .Violín: Gustavo Abela. Violonchelo: Rosa García
Coro Femenino de la Asociación Cultura ‘Cruz de mayo’ del Albaicín
Dramaturgia y adaptación de las letras: Alberto Conejero
Composición y dirección musical: Agustín Diassera y Dani de Morón
Composición y adaptación de las letras: Sergio el Colorao
Coreografía: Patricia Guerrero, La Venidera (Albert Hernández e Irene Tena), Eduardo Leal y Alfonso Losa
Dirección: Patricia Guerrero