Más allá de su condición de hijo de Demófilo, el antropólogo y folclorista que tanto hizo por la cultura jonda, Antonio Machado es un poeta querido por los flamencos. Desde Enrique Montoya a Vicente Sordera, Carmen Linares o Enrique Morente, son muchos quienes se han acercado a abrevar en sus aguas siempre claras y nutritivas. También lo ha hecho José Luis Montón en Musas de Machado, la propuesta en la que el guitarrista se acompaña de la cantaora Inma La Carbonera y la actriz Natalia Erice para dar vida al poeta.
Lo cierto es que la sinopsis del programa no empieza muy bien. “Incontables fueron las musas de Machado, tantas como los versos que anotaba en papel y llenaban de poemas sus bolsillos…” Bueno, pensar que para escribir cada uno de sus versos el poeta necesitara de la comparecencia de una figura inspiradora resulta cuanto menos chocante. Pero subrayar el costado femenino de Machado, de acuerdo con estos tiempos de militante (y necesario) feminismo, parece definitivamente forzado. Ni se destacó don Antonio especialmente por su poesía amorosa, aunque la tiene y muy buena, ni resulta fácil sacarle el female touch a su personalidad taciturna, su angustia existencial y su torpe aliño indumentario.
Todos estos reparos se desvanecen cuando empieza a sonar la guitarra del maestro Montón. Un veterano que ha tocado con algunos de los mejores cantaores y bailaores del panorama, y grabado discos de muy grata memoria entre los aficionados. Y sigue siendo un intérprete pulcro, que se recrea en los detalles sin alardes, en esta ocasión echándose a la espalda la dirección musical de un montaje que combina el monólogo de la actriz Natalia Erice y los cantes de Inma la Carbonera, basados en poemas del protagonista.
Es innegable que el flamenco está presente de principio a fin, aunque combinado con otras músicas como el chotis Madrid de Agustín Lara o la canción popular Los cuatro muleros. Tangos, bulerías, rumbas, se van sucediendo para ilustrar los pasajes de la vida de Machado a través de algunos de sus poemas más conocidos: A un olmo seco, El mañana efímero, Anoche cuando dormía, Retrato…
«Los artistas se entregan y el homenaje es bien merecido, pero don Antonio Machado se merece un par de vueltas de tuerca más, una forma algo más redonda de mostrar su complejidad y su riqueza»
La voz de La Carbonera se adapta bien a unos versos que gozan de su propia, potente música interna, como ya hiciera junto a Antonia Jiménez en A Gaya, mientras que la guitarra de Montón actúa como hilo y elemento cohesionador del repertorio. Sin embargo, conforme avanza la función se van detectando algunas lamentables carencias que no se deben tanto a la ejecución musical, como al concepto global de este trabajo.
Una de ellas se refiere al propio texto, en el que Machado habla en primera persona por boca de Erice. Se trata de un ejercicio muy arriesgado, porque si no se va a estar a la altura del personaje (y todos sabemos qué difícil es estarlo) se corre el riesgo de empobrecer o banalizar su discurso. Por otro lado, narrar una vida prácticamente encadenando datos biográficos es dejar el listón de la empresa muy abajo: nadie contaría la suya como si fuera una entrada de la Wikipedia. Ese es a mi parecer el gran error de la dramaturga Lara Carrasco, no atreverse a ir más allá y limitarse a seguir una historia lineal bastante conocida, y casi calcada a la estructura temporal del documental Los días azules de la directora sevillana Laura Hojman.
También me parece un error, a pesar de su importante esfuerzo, el hecho de que la actriz Natalia Erice se dirija a sí misma, pues permanece demasiado tiempo anclada en un registro alegre, jovial, para narrar una historia de fondo muy dura, que llega hasta la tragedia. Resulta imposible imaginar al poeta en ese tono. Tampoco me parece el mejor remate ese Mañana efímero a compás de tanguillos cantado con chuleta (de acuerdo, la letra es larga y compleja, pero…), ni el colofón didáctico, pues la historia de Machado y de su España atroz se cuenta muy bien sin moraleja.
Y es una pena, porque los artistas se entregan y el homenaje es bien merecido, pero don Antonio se merece un par de vueltas de tuerca más, una forma algo más redonda de mostrar su complejidad y su riqueza.
Imagen superior: José Luis Montón – Foto: Silvestre Moreno
Ficha artística
Musas de Machado.
La Fundición, Sevilla
1 de febrero de 2024
Autora: Lara Carrasco
Música: José Luis Montón
Intérpretes: Natalia Erice e Inma La Carbonera