En pleno corazón de la capital española, Rosana de Aza recibe una vez más a Expoflamenco. Mujer, empresaria y flamenca. Todo un aderezo de idóneas raíces para, en mi caso, admirar a alguien. Sobre todo porque es muy difícil sobrevivir con estas cualidades en una sociedad que está dominada por una situación exasperante donde, de una manera u otra, todos sufrimos las consecuencias. Si bien es cierto que cada puñadito de meses, muchos de ellos ven su desesperación revestida de un pequeño halo de esperanza. Pero ¿y el sector flamenco? ¿Cuándo podrá advertir esa refulgencia que le dé un pellizco de aliento tranquilizador para pensar que se puede tirar hacia delante? El flamenco. Los tablaos. El arte español. ¿A qué se pueden agarrar? Rosana afirma que, sin duda, se necesita ayuda del Gobierno. Una buena cohesión de los principales ministerios para lanzar un salvavidas a este sector y poder proliferar de manera paulatina. Sin prisa. Pero siempre sin pausa. Como vienen demostrando desde el principio de la emersión de esta parcela artística tan especial.

«Madrileños nostálgicos con muchas ganas de volver a disfrutar del arte local, de letras castizas y pequeños retablos de arte, sabiduría y acordes inmersos en tradición»

Hay una declaración que me llama la atención y me hace recapacitar y reaccionar de repente. Ese pequeño fulgor que se busca a la desesperada en cualquier lugar cuando no queda la avidez necesaria para seguir ideando itinerarios nuevos. Una pizca de certidumbre para continuar. No hay mayor verdad. Nos hemos preocupado lo suficiente por la situación. Pero sin duda falta ocupación por parte de los preocupados. No hay que cesar. Tomar como ejemplo la actitud firme, delicada y apostante de nuestra protagonista. Unión, cohesión, fuerza, creatividad e inquietud tienen que ondear con más vigor en estos tiempos.

El estímulo que la empresaria necesitaba para reabrir el lugar, además de una exacerbada valentía y positividad, fue la necesidad que vio en sus vecinos aledaños. Madrileños nostálgicos con muchas ganas de volver a disfrutar del arte local, de letras castizas y pequeños retablos de arte, sabiduría y acordes inmersos en tradición. Es por esto además por lo que surge la idea de construir el espectáculo ¡Viva Madrid vivo! Una idea original de ella misma. Generosa y deseosa de alimentar la parte más sensible del alma de los residentes de este barrio tan pinturesco y castizo. Una representación dirigida al público local. Porque considera que es necesario recuperar toda la tradición de esta ciudad y ofrecerla concentrada. Máxime después de la ardua y prolongada etapa que obstaculiza el desarrollo normal de cualquier actividad. La gente necesita recuperar su identidad y sentirse parte de sus rincones. Para ello, tanto la dueña del Centro Cultural Flamenco Madrid como sus artistas trabajan en el proyecto desde la última época estival seleccionando de manera exquisita el repertorio tradicional a interpretar.

«¿Es casualidad que este lugar tan flamenco y coqueto esté situado en el Barrio de Justicia? Quizá sea el comienzo del fin que todos esperamos»

Al salir del Centro Cultural me paro, observo a mi alrededor para encontrar esos pellizcos oriundos de los que he tenido el gusto de hablar con Rosana. Y los encuentro. Y vuelvo a repasar la conversación de principio a fin. ¿Es casualidad que este lugar tan flamenco y coqueto esté situado en el Barrio de Justicia? Quizá sea el comienzo del fin que todos esperamos. Por el espíritu de lucha de las personas que conforman los espectáculos que aquí se representan. Por el embrujo que hay en cada uno de sus recovecos. Porque los artistas que dan vida al local están elegidos con tanta pulcritud y dedicación, que en cada representación logran ofrecer una entrega y una calidad admirables. En este caso, incluso han logrado escribir sus propias letras para brindar verdad y solera al público. Porque saben que todos necesitamos conocer la historia de cada rinconcito del lugar del que formamos parte. En este caso, de Madrid. De la Corte. Para sentirnos más castizos. Más fieles. Pero sobre todo más flamencos.

Centro Cultural Flamenco Madrid

¡Viva Madrid vivo!  Una idea original de Rosana de Aza
Dirección: C/ Conde de Xiquena, 6. A partir del 5 de marzo de 2021
Dirección artística: Jesús Fernández
Baile: Eva Manzano
Cante: Juañarito
Guitarra: Joni Jiménez