Úrsula López: «Al Ballet Flamenco de Andalucía se le ve más guapo ahí afuera»
La obra 'El maleficio de la mariposa' de Federico García Lorca regresa a Madrid, en concreto a los Teatros del Canal. Esta vez la pasea el Ballet Flamenco de Andalucía, cuya directora, la bailaora cordobesa Úrsula López, recuerda que esas coreografías tan modernas tienen un siglo de edad.
El Ballet Flamenco de Andalucía (BFA) presenta los días 10 y 11 de diciembre su espectáculo El maleficio de la mariposa en Teatros del Canal, Madrid. Se trata de una obra basada en la pieza homónima estrenada hace un siglo por Federico García Lorca e inspirada en la danza de Antonia Mercé la Argentina y Encarnación López la Argentinita o en los bailes de Carmen Amaya. La propuesta se perfila como una combinación de ese espectáculo clásico con un sonido, escenografía y vestuario contemporáneos y actuales. La directora del BFA, Úrsula López (Montilla, Córdoba, 1976), afirma que «sin saberlo, muchos artistas de ahora bailan o realizan proyectos como La Argentina, La Argentinita o Carmen Amaya. Ellas fueron pioneras en la forma de entender y evolucionar el flamenco y la danza, cuidando por primera vez iluminación, dirección de escena y escenografías, música, elección de letras, etcétera».
– Doña Úrsula, intente describirnos en pocas palabras qué significa para usted dirigir el Ballet Flamenco de Andalucía. Imaginamos pocos oficios más enriquecedores o emocionantes para un artista flamenco. ¿Qué sentimiento le recorre el cuerpo?
– Dirigir el Ballet Flamenco de Andalucía es sinónimo de responsabilidad. Desde un principio debes distinguir que no es tu propia compañía y que no puedes utilizar artísticamente este cargo para tus propias inquietudes, sino que tienes una misión, obligación y objetivo, que no es otro que mantener un nivel de calidad alto con los integrantes que se presentan a las audiciones, con la divulgación de nuestro patrimonio y con la salvaguarda del origen y la esencia del flamenco. Pero también abiertos a una mirada al futuro. No deja de ser un trabajo enriquecedor y emocionante, al trabajar con los jóvenes bailarines.
– Háblenos de El maleficio de la mariposa, el montaje que presentan los días 10 y 11 de diciembre en Madrid. ¿Qué tal le sienta a esta clásica obra de Lorca la lectura presente del BFA?
– El Maleficio de la Mariposa: Mujeres, danzas y bailes en tiempo de Federico García Lorca no trata de una reposición fidedigna de la obra de Federico. Como su nombre indica, es una evaluación calculada de un tiempo fundamental para la danza y el baile, que por sus elementos coreográficos nutren el Ballet Andaluz desde sus principios. Las danzas clásicas españolas –escuela bolera, clásico español, bailes regionales, etc.–, el flamenco –tanto el escénico como el festivo, el solista y el de grupo, el tradicional y el innovador– y los rasgos españoles de las danzas modernas y americanas –desde el ballet clásico hasta la Modern Dance– toman en tiempos de Federico García Lorca un despliegue formal definitivo que sigue siendo hegemónico hoy día.
«Lo que me ha enseñado este ‘Maleficio’ es que aún no tengo claro qué es “modernidad”. La historia reciente nos ha mostrado cómo en su tiempo también llamaron “modernos” a Paco de Lucía, Camarón o Morente»
– ¿Va a ver Madrid, sus Teatros del Canal, el mejor Ballet Flamenco de Andalucía?
– Conozco esta institución desde sus comienzos, porque ya fui integrante del Ballet como bailarina los primeros años y he seguido su trayectoria como aficionada de todas las direcciones artísticas. Para mí todos siempre han sido el “mejor” Ballet Flamenco de Andalucía. Hay que conocer cómo funciona esta institución y los medios de la misma. El Ballet funciona como trampolín de los nuevos valores que por ley deben abandonar la institución –a veces sin poder terminar su proceso de aprendizaje– y esto hace que no haya un núcleo fuerte de solistas o primeros bailarines como en otros ballets. En mi caso, este es el tercer elenco de mi periodo de dirección. Pero sí, para mí sí es el mejor Ballet Flamenco de Andalucía que me han dejado tener.
– ¿Quién baila ahora como Antonia Mercé la Argentina, Encarnación López la Argentinita o Carmen Amaya?
– Bueno, creo que sin saberlo muchos artistas de ahora bailan o realizan proyectos como La Argentina, La Argentinita o Carmen Amaya. Ellas fueron pioneras en la forma de entender y evolucionar el flamenco y la danza, cuidando por primera vez iluminación, dirección de escena y escenografías, música, elección de letras, etc. Se impregnaron de la corriente de su tiempo y trabajaron en sus elencos con los artistas mas importantes de su tiempo como Pastora Imperio, La Macarrona, La Malena, Vicente Escudero, Manuel de Falla, Ezpeleta, etc. Así, cuando bailan por seguiriya, en cierta manera están bailando como Pilar López, llevada casi por primera vez al baile en su espectáculo de Los Cabales. O por taranto, aportación especial de Carmen Amaya en 1942 en Nueva York, versión coreográfica que hasta entonces no existía de dicho cante.
– Según leemos, esta obra de Federico García Lorca fue estrenada el 22 de marzo de 1920 en el Teatro Eslava de Madrid y recibió abucheos. Se comprende que el público de la época no debía estar preparado para contemplar grandes insectos por el escenario.
– A pesar de que la obra es un recorrido por las coreografías, danzas y bailes que Federico vio o pudo ver a lo largo de su vida y en los que pudo participar activamente, intentamos conservar el mensaje principal del Maleficio. Pero un siglo después de aquel escándalo, que el público no supo entender, nos encontramos tristemente con noticias que nos recuerdan, al igual que en aquel tiempo, que la sociedad sigue teniendo problemas similares con la integración, el respeto a la diversidad y a las minorías.
– Pero no se preocupe. La audiencia madrileña de hoy en día sabe valorar la combinación de clasicismo y contemporaneidad.
– A esta apreciación te puedo comentar que artistas importantes de hoy en día, al ver los primeros ensayos generales, me comentaron que algunas coreografías les habían parecido demasiado modernas, pero la realidad es que tienen más de cien años. Ya en ese tiempo eran, podríamos decir, bastante contemporáneos.
«Llevo más de treinta años subiéndome a los escenarios y he tenido la oportunidad de recorrer el mundo varias veces. Y cómo se acoge y recibe a nuestra máxima expresión cultural en todo el mundo es a veces hasta abrumador»
– ¿Qué le diría a esos aficionados jondos que se quejan de que la programación de la Bienal de Sevilla y otros grandes eventos incluye demasiada modernidad?
– En términos futbolísticos, cada español es un seleccionador nacional de futbol. Imagino que cada programador o director de cualquier festival también tiene sus convicciones e ideas de cómo hacer mejor su trabajo. A nivel personal, solo te puedo comentar que tengo muy claro de dónde vengo y con quién he tenido la oportunidad de formarme y trabajar, lo que tengo que cuidar y enseñar, y que sea el propio artista cuando comience su carrera en solitario el que elija el camino que quiera tomar. Lo que me ha enseñado este Maleficio es que aún no tengo claro qué es “modernidad”. La historia reciente nos ha mostrado cómo en su tiempo también llamaron “modernos” a Paco de Lucía, Camarón o Morente, entre otros, y algo semejante sufrieron también otros artistas antes que ellos.
– ¿Satisfecha con el rumbo que lleva bajo su dirección la «compañía institucional de danza de la Junta de Andalucía», según se define esta entidad en la propia web del BFA? ¿Nos puede adelantar alguna acción futura?
– Una nunca puede estar satisfecha del todo con su trabajo. En mi caso, soy muy exigente en lo que respecta al trabajo, a la disciplina y al compromiso, y siempre tienes la duda de que se puede y se debe hacer más. Por un lado, me encuentro muy satisfecha respecto a uno de los objetivos de mi proyecto para el Ballet Flamenco de Andalucía como plataforma y lanzamiento de los integrantes del ballet, enriqueciendo sus aptitudes y capacidades para que se conviertan en los futuros profesionales del flamenco. En este periodo han salido cinco bailarines que hoy forman parte del Ballet Nacional de España: Álvaro Gordillo, Manuel del Río, Aitana Rousseau, Diego Aguilar y Ana Almagro. También hemos disfrutado de Águeda Saavedra, nominada premio revelación del Festival de Jerez 2022, y pertenecen al elenco actual los recientemente galardonados con primer premio del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba 2022, Juan Tomas de la Molía en la categoría de baile y Rafael del Calli en la categoría de cante, además de otro finalista en la categoría del cante, Juan de Mairena. O he tenido buen ojo al hacer las elecciones o les ha ayudado el periodo de trabajo diario en el BFA. En cuanto al futuro, no te puedo decir nada. A día de hoy, yo personalmente no tengo noticias de cuál va a ser el futuro del ballet y cuál es el rumbo que va a seguir esta institución. Mi proyecto para el próximo año se basa en cerrar el círculo del Maleficio con la resurrección de Federico en manos de los artistas que han ayudado con su trabajo a la inmortalidad de nuestro afamado poeta. Un recorrido a través de Vicente Escudero, Antonio Ruiz Soler, Manuela Vargas, Enrique El Cojo, Rafael Aguilar, José de la Vega, Antonio Gades, Los Bolecos, El Güito, Salvador Távora y Mario Maya, entre otros.
– El BFA es embajador de la cultura andaluza en el mundo. ¿El flamenco es más guapo cuando lo miran desde fuera?
– Cualquier artista flamenco que trabaja fuera de nuestra tierra es un embajador de nuestro arte único e irrepetible. Llevo más de treinta años subiéndome a los escenarios y he tenido la oportunidad de recorrer el mundo varias veces. Y cómo se acoge y recibe a nuestra máxima expresión cultural en todo el mundo es a veces hasta abrumador. Sin lugar a dudas, ser embajador y difusor de nuestra cultura es la función primordial de nuestro Ballet y, como tú has dicho, al ballet y a todo el flamenco en general se le ve más guapo ahí afuera.