Viendo los carteles de algunos de los festivales de este verano, sobre todo los de los clásicos, nos preguntamos a veces quién los hace. ¿El municipal del pueblo? ¿El alcalde? A veces argumentan que ya no se pueden hacer carteles como los de antes, “porque no hay figuras como las de antaño”. Algo de cierto hay en eso, desde luego. Sin embargo, sí hay cantaores y cantaoras que podrían entrar en los carteles de festivales como la Reunión de Cante Jondo, de La Puebla de Cazalla, el Gazpacho de Morón, de Morón de la Frontera, o La Caracolá de Lebrija.

¿Por qué contratan en la Reunión de Cante Jondo a Montse Cortés y no a Manuel Cástulo o José Canela? No es que no pueda cantar la catalana en La Puebla, pero si quieren ser coherentes con la filosofía de Moreno Galván y Menese, ¿no pegarían más Cástulo o Canela hijo? A lo mejor piensan que no son cantaores de peso para la Reunión. ¿Y sí lo son Manuel de la Tomasa y Pepe el Boleco, dos adolescentes? En ExpoFlamenco hemos analizado estos días los carteles del verano y el asunto daría para un análisis de cientos de folios.

Está claro que los festivales de los pueblos han tenido que evolucionar y adaptarse a los nuevos tiempos, pero se están haciendo verdaderas barbaridades. Nuestro compañero Manuel Bohórquez escribía hace años sobre este mismo tema y llevaba a la conclusión de que “el cartel de un festival no lo puede hacer cualquiera”. Evidentemente, pero ocurre cada verano y ya estamos viendo en lo que han quedado citas con historia como las de Juan Talega o la Reunión.