Inauguración de El Contrabando, una peña flamenca en Paymogo
La Peña Flamenca El Contrabando nace en Paymogo (Huelva) para «mantener viva la llama del flamenco».
En las pupilas del Chanza
la luna se reflejaba,
la guardia carabinera
vigilante en la lontananza,
pero mi jaca pasa la primera.
Paymogo tiene una ermita preciosa que te da la bienvenida en la carretera. Mil habitantes, muy buena gente, los mejores gurumelos, una escuela de flamenco con sesenta y cinco alumnos y Manolo Sierra al frente. Una afición envidiable y desde el 15 de septiembre también una peña flamenca.
Han bautizado a la criatura en homenaje a aquellos paymogueros que para sobrevivir en tiempos de hambruna se jugaron la vida vadeando la rivera del Chanza. Acarreaban la mercancía de Portugal. Sobre sus hombros cansados o a caballo traían leche, pan, huevos, carne o café para calentar los estómagos vacíos de sus familias. Los salarios insuficientes y las miserias que dejó la Guerra Civil fueron el caldo de cultivo de El Contrabando. Así se llama la peña, que nace para «mantener viva la llama del flamenco».
Y arranca con más de 130 socios abarrotando su sede, compartida con la Peña Montera de Paymogo. Su presidente Rafael Moriña capitaneará igualmente la junta de esta nueva entidad. Quiso agradecer la acogida, además de la inestimable ayuda prestada por el Ayuntamiento y otros colaboradores como la sociedad Pagos de Sierra y la empresa Hermanos Vega, que les donó el escenario. Y se mostró complacido por la asistencia de representantes de otras peñas y asociaciones. Se dieron cita en la inauguración la Federacion Onubense de Peñas Flamencas El Fandango, la Peña Flamenca de Huelva –y su socio de honor Camilo Gómez en un audio–, la Peña Flamenca La Orden, la Peña Flamenca Femenina de Huelva, la Tertulia Flamenca de Las Colonias, la Peña Flamenca El Gatillo de Valverde del Camino, la Peña Flamenca Juan Talega de Dos Hermanas en la figura del aficionao cabal Eugenio Martín («uno así en cada peña necesita el flamenco», dijo Manolo Sierra), la Asociación Cultural Flamenca Amigos del Chumi, de El Puerto de Santa María, la Asociación Cultural Flamenca La Cavaera, de Huelva, la Peña Flamenca de Santa Bárbara de Casa, la Peña Flamenca El Higueral, de Huelva, los gerentes de Pagos de Sierra y Hermanos Vega, el decano de la crítica flamenca, amigo y compañero Manuel Martín Martín mediante un escrito, al igual que Jesús Naranjo, colaborador de este portal, y un servidor. Tuvieron el detalle de agasajarnos a todos con un obsequio en recuerdo de este día señalaíto y algunos les correspondieron, aparte de con la enhorabuena, con bonitos deseos y algunas palabras alentadoras, intercambiando regalos en la celebración.
«Acarreaban la mercancía de Portugal. Sobre sus hombros cansados o a caballo traían leche, pan, huevos, carne o café para calentar los estómagos vacíos de sus familias. Las miserias que dejó la Guerra Civil fueron el caldo de cultivo de El Contrabando»
Victoria Prieto, presidenta de la Federación Onubense de Peñas Flamencas El Fandango, les tendió su ayuda porque «las peñas son los templos que sostienen al flamenco». Pepe Bravo, de la Peña Flamenca El Gatillo, les recordó que «las peñas adolecen de un buen número de aficionaos no solo que pague sino que asista», por lo que solicitó a los socios paymogueros que acudieran a las convocatorias y actos de la peña. Manuel García, presidente de la Asociación Cultural Flamenca Amigos del Chumi, pidió a la Administración que colaborara siempre y halagó el trabajo que se hace en Paymogo con los jóvenes, «el futuro del flamenco». Se leyó el escrito de Martín Martín, que les dio la enhorabuena y describió a la localidad como «el paraíso de lo muy flamenco» y también el de Jesús Naranjo, que no concibe este arte «sin el concurso de las peñas» y destacó «la manera autóctona de sentirlo en Paymogo y la labor de Manolo Sierra, santo amador de la causa flamenca». La concejala de Cultura Rocío Núñez profirió que este acto marcaba «un antes y un después en el pueblo», se sentía «orgullosa de esta aventura» y se prestó para todo lo que necesitaran y estuviera en sus manos. El alcalde José Francisco García dijo que «la creación de esta peña es todo un lujo para los paymogueros».
Sierra se deshizo en agradecimientos y expresó su felicidad. «Paymogo es un pueblo cargao de majaretas por el flamenco y por eso les doy las gracias. Once majaretas y yo, además de los 130 socios, son los culpables de que hoy nazca esta peña», cuya junta directiva quedó configurada con los siguientes integrantes:
Rafael Moriña, presidente.
Juan Manuel Calderón, vicepresidente.
Paqui Borrero, tesorera.
Manolo Sierra, vocal de relaciones públicas.
Benito Borrero, vocal.
Rosario Campos, vocal.
Estrella Domínguez, vocal.
Juan Antonio Domínguez, vocal.
Y Yolanda Márquez, secretaria, que hizo de maestra de ceremonias con su magnífica presentación.
Tras los entrañables y emotivos actos protocolarios brindaron con el cante de la jovencísima cantaora local Consuelo Haldón para festejar como se debe el alumbramiento de la nueva peña.
→ Ver aquí la crónica de la actuación de Consuelo Haldón en Paymogo