El concurso internacional de baile Flamenco Puro regresa a Jerez de la Frontera en su séptima edición, prevista del 16 al 22 de febrero del 2020. Así, el concurso abandona su sede oficial –situada en Turín– por segunda edición consecutiva para mudarse a una de las cunas del flamenco. Una decisión tomada por Manuel Betanzos y Mónica Morra, organizadores y directores artísticos del certamen.

El Festival de Jerez siempre ha estado pendiente del concurso Flamenco Puro ofertando prestigiosas becas. Pero no fue hasta el año 2018 cuando introdujo una gala dentro de la XXII edición de su festival con ganadores de concursos anteriores Flamenco Puro. A partir de ahí Manuel Betanzos y Mónica Morra decidieron trasladar su concurso de Turín a Jerez de la Frontera en 2019 y también repetirán en 2020.

La edición Flamenco Puro 2019

El Palacio de Villapanes fue testigo del 17 al 20 de febrero de 2019 de la fase de selección del concurso. Y la Sala Compañía recibió la gran final el día 21 de febrero. Como miembros del jurado estuvieron el propio Manuel Betanzos, Alicia Márquez y el bailaor y maestro jerezano Andrés Peña como jurado invitado.

La directora del Festival de Jerez, Isamay Benavente, otorgó un nuevo premio, el más prestigioso, creado para celebrar este nuevo hermanamiento con el objetivo de apoyar todavía más la formación de nuevas figuras del flamenco.

Mónica Morra, creadora de Flamenco Puro

«La palabra concurso suele hacernos pensar en una fría idea de competición, donde es importante ser sobresaliente y donde el objetivo principal no es la experiencia, sino el premio. De hecho, los principales concursos son dedicados a bailaores que ya son profesionales y que utilizan el  certamen como escaparate para empujar su carrera profesional.

También se suele asociar la palabra concurso al concepto de juicio, porque evidentemente el concursante tiene que actuar delante de ilustres personajes que son llamados únicamente para juzgar, y al concepto de justicia o, más frecuentemente, de injusticia porque muchas veces para quien participa es difícil valorar lúcidamente y aceptar las decisiones del jurado que justamente tiene este cometido.

En fin, el simple hecho de asociar cualquier forma de arte a un mero concepto de competición nos deja un desagradable sabor de boca. Desde el principio yo he pensado en este evento como algo diferente, en concepto, experiencia y objetivo», explica Mónica Morra, directora del evento.

Manuel Betanzos, dirección artística

«Flamenco Puro abre sus puertas a bailaoras y bailaores provenientes de todo el mundo y todos los niveles. Jóvenes estudiantes que todavía no son profesionales, aficionados y profesionales, divididos por categorías –alumnos, solistas, grupos coreográficos– según la edad y las experiencias vividas, tienen la posibilidad de actuar delante de maestros de gran prestigio que, y esta es una particularidad, son a la vez guías, maestros y jurado.

Cada categoría se desarrolla de forma distinta. Los alumnos –no profesionales/aficionados– participan en unas clases generales, donde en el mismo día aprenden y directamente bailan una simple coreografía montada por los mismos maestros del jurado. Los solistas –no profesionales/ aficionados/profesionales– presentan al jurado su número solo de estilo tradicional, acompañados por los músicos del concurso, con los cuales solo tienen pocos minutos para concretar la estructura de su baile. Los grupos coreográficos –alumnos de academias no profesionales/profesionales– presentan al jurado su coreografía, con música grabada o en directo», cuenta Manuel Betanzos, director artístico del evento.