Antonio Canales y Sara Baras reciben las Medallas de Oro al Mérito en las Bellas Artes
Los bailaores Antonio Canales y Sara Baras cierran el 2020 de forma inmejorable tras recibir uno de los principales galardones del género artístico en España.
«Cuando me ha llamado el ministro creí que era para felicitarme las Pascuas, casi ni le he dejado hablar». Así reaccionaba Antonio Canales ante la llamada de José Manuel Rodríguez Uribes, ministro de Cultura y Deporte de España, en declaraciones recogidas por ABC. No es para menos. El bailaor sevillano ha recibido la Medalla de Oro al Mérito en la Bellas Artes, galardón que también ha recaído en la bailaora gaditana Sara Baras. Ambos son los únicos flamencos de las treinta y dos personalidades premiadas. En 2019 fueron premiados el guitarrista Víctor Monge Serranito, los cantaores El Pele y María Vargas, y las peñas La Platería de Granada y El Taranto de Almería.
Este galardón distingue a las personas y entidades que hayan destacado en el campo de la creación artística y cultural o hayan prestado notorios servicios en el fomento, desarrollo o difusión del arte y la cultura o en la conservación del patrimonio artístico.
«No he parado de trabajar, de entregar mi corazón, ayudar a los demás, dar clases online y apoyar al flamenco» (Antonio Canales)
«He sentido un sobresalto en el corazón al recibir la noticia», ha explicado Canales a los compañeros de EFE. Para el trianero, se trata de un colofón «en un año tan complicado, en el que no he parado de trabajar, de entregar mi corazón, ayudar a los demás, dar clases online y apoyar al flamenco». Además, es un reconocimiento que lo ha dedicado «a todos los que durante mi carrera me han ayudado, enseñado, corregido o apoyado».
«Yo nací en una familia humilde, donde he sido muy querido, y ahora mira dónde he llegado y dónde estoy. Esta medalla significa muchísimo. Y además, compartir el año con el galardón otorgado a don Emilio Lledó, al que admiro muchísimo, es un privilegio. A lo largo de mi vida he trabajado mucho, he fallado también, pero me he rehecho y aquí estoy y seguiré estando por el flamenco, que es mi pasión y mi vida», ha citado el artista a ABC.
Por otro lado, la bailaora Sara Baras ha explicado a Diario de Cádiz que «cuando me lo dijeron creía que era una inocentada». La artista ha reconocido que le da fuerzas para seguir luchando. «De verdad, no me lo creía, pero cuando te conceden un reconocimiento así, y más en el momento tan delicado en el que estamos los artistas y el mundo de la cultura, es como un recordatorio de que hay que seguir luchando con ganas. Al menos, yo me lo he tomado así», ha afirmado Baras.
Sobre los premiados
Sara Baras (San Fernando, Cádiz, 1971)
Bailarina, coreógrafa y directora. Iniciada en el baile flamenco de la mano de su madre, Concha Baras, emprendió su carrera profesional con la compañía Manuel Morao & Gitanos de Jerez. Tras participar en obras como Mujeres de Merche Esmeralda o ¡Mira qué flamenco! de Javier Barón y colaborar como artista invitada de Antonio Canales, creó su propia compañía. El Ballet Flamenco Sara Baras se estrenó en 1998 con el espectáculo Sensaciones. Desde entonces, ha recorrido los escenarios internacionales con producciones como Sueños (1999), Juana la Loca (2000), Mariana Pineda (2002), Sabores (2005), Carmen (2007), La Pepa (2012), Voces (2015) y Sombras (2019), además de protagonizar el mano a mano con el tenor José Carreras, Baras-Carreras (2006). Entre los galardones que jalonan su carrera están el Premio Nacional de Danza 2003 y el Olivier Award 2020 de Reino Unido.
Antonio Canales (Sevilla, 1961)
Bailaor, coreógrafo y director. Nacido en una familia de tradición artística, logró su primera oportunidad profesional en el Ballet Nacional de España (BNE), del que fue bailarín solista, y para el que ha coreografiado dos obras: Grito (1998), estrenada en el City Center de Nueva York, y A ciegas (1999), montaje con el que debutó en el Teatro de la Zarzuela como invitado del BNE. Al frente de su propia compañía, ha estrenado obras de éxito como Torero (1993), Gitano (1997), La Cenicienta (2000), Ojos Verdes (2003) y Carmen, Carmela (2004). Además, participó como intérprete y coreógrafo en Sangre de Edipo, estrenada en el Festival de Mérida 2005 y dirigida por Hansel Cereza. En el cine, ha protagonizado el largometraje Vengo (2000) de Tony Gatlif, y es autor de la novela Sangre de albero (2002). Entre los reconocimientos a su trayectoria, sobresale el Premio Nacional de Danza 1995.