Contenido del curso
LAS LETRAS DEL FLAMENCO
Acerca de las clases

También es bastante común encontrar la quintilla en la petenera, quintilla a la que se le añade, además de los redobles de rigor, el obligado en estos cantes, en este caso el clásico ripio mare de mi corazón. Escuchamos una de las variantes cortas de petenera a Naranjito de Triana.

Llorando y en penitencia
y a tu vera un día me fui
a ver si con mi presencia
soleá de mi doló (ripio)
a ver si con mi presencia (redoble)
te adolecías de mi
Te adolecías de mi (r)
y no tuviste clemencia

La Niña de los Peines en otra de las variantes de petenera, uno de los cantes en los que el magisterio de la genial cantaora sevillana quedo para siempre grabado en el mejor estilo de cante jondo, a pesar del mal bajío que algunos insisten en otorgar a este cante  lleno de belleza musical y flamencura.

Yo quisiera renegar
Yo quisiera renegar (redoble)
de este mundo por entero
volver de nuevo a habitar
madre de mi corazón (ripio)
por ver si en un mundo nuevo (r)
encontraba más verdad.

Y de nuevo por la principal forjadora de estos cantes, La Niña de los Peines:

Niño que en cueros y descalzo
niño que en cueros y descalzo (redoble)
va llorando por las calles
ven acá y llora conmigo
alma de mi corazón (ripio)
ven acá y llora conmigo (r)
yo tampoco tengo mare
que tampoco mare tengo (r)
que la perdí cuando niño

Participa en la conversación